Revista Única comparte la historia de San Bartolomé es patrono de los carniceros.
La fiesta de San Bartolomé es el 24 de agosto pero ¿quién es Bartolomé?, es uno de los 12 apóstoles; su nombre proviene del arameo que significa el hijo de Ptolomeo, también se le conoce como Natanael.
Es patrono de los carniceros, fabricantes de libros, guantes, pieles, mercaderes de queso, viñadores, albañiles, además es sanador de las convulsiones, crisis espasmódicas y enfermedades nerviosas.
En Puebla se le venera y tiene su parroquia en Xochitlán de Vicente Suárez en la sierra.
De este apóstol se habla de él en el Evangelio de San Juan, donde nos explica que uno de los discípulos de Jesús fue Natanael, en la aparición de su Maestro en el Mar de Tiberiades, después de su resurrección esto se encuentra en el capítulo 21 versículo 2, Juan es el único que lo menciona.
Pero cuando se menciona el nombre de Felipe siempre va seguido de Bartolomé por tradición se dice que fue el mismo.
De acuerdo a la tradición se dice que Bartolomé se marchó a predicar el Evangelio a la India, donde dejó una copia del Evangelio de Mateo escrito en arameo.
También se le atribuye que acudió a Armenia a predicar el cristianismo, junto a San Judas Tadeo.
Ambos considerados Santos patrones de la Iglesia Apostólica Armenia puesto que fueron los primeros en fundar el cristianismo en ese país.
Cuentan que su martirio y muerte se le atribuye a Astiages rey de Armenia y hermano del rey Polimio a quien Bartolomé había convertido al cristianismo.
Según la historia dice que los sacerdotes de los templos paganos se quejaron ante el rey Astiages de que ya no tenían seguidores, el rey mando a llamar a Bartolomé y le ordenó que adorara a sus ídolos, tal como él había hecho con su hermano.
Ante la negativa de Bartolomé, el rey ordenó que fuera desollado vivo en su presencia hasta que renunciara a su Dios o muriese.
Se dice que las reliquias de San Bartolomé, fueron enterradas en la isla de Lipara y eventualmente fueron trasladadas a Benevento, Italia y después a Roma donde ahora están en la Iglesia de San Bartolomé, en la Isola San Bartolomeo del río Tiber.
Dicen que la Reina Emma, la esposa del rey Canute entregó uno de sus brazos a Canterbury en el siglo XI.
La imagen de San Bartolomé a lo largo de la historia del Arte sufrió pocas modificaciones siendo la más común la representación del Santo en el momento de su martirio, siendo desollado, ya sea sobre un potro o atado a un árbol.
También lo representan haciendo milagros como resucitando a los hijos del rey Polimio y liberando a la hija de éste poseída por el demonio, en escasas ocasiones aparece siendo flagelado.
En el arte se le representa con gran cuchillo, aludiendo a su supuesto martirio, según el cual fue desollado vivo, razón por la cual es el patrono de los curtidores.
San Bartolomé en ocasiones aparece despellejado, mostrando su piel cogida en el brazo como si se tratara de una prenda de vestir. Pero en la época del Barroco fue común representarlo con un largo manto blanco, con las Escrituras Sagradas y mostrando un cuchillo.
Además se le representa sujetando una cadena diablesa. El origen de este símbolo puede tener una doble sentido en los Evangelios Apócrifos, Bartolomé requiere a Cristo Resucitado que le muestre al maligno Belial, después de habérselo mostrado, Jesús le indica “písale la cerviz y pregúntale».
Y el segundo en la tradición se cuenta que expulso a un demonio, denominado Astaroth, de un templo donde éste vivía dentro de una estatua.
San Bartolomé demostró ineficacia de la estatua, que decía curar las enfermedades, expulsó al demonio y consagró el templo a Jesús.
En cuanto a ¿cómo era físicamente el santo? De acuerdo a la descripción que hace Berith a los enfermos es un hombre de estatura normal, cabello ensortijado y negro, tez blanca, ojos grandes, nariz recta y bien proporcionada, barba espesa y un poco entre cana.
Su semblante presenta un constante aspecto alegre y risueño. Con esto conocemos más de la vida de los santos.
Imágenes Wikimedia
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