Los médicos reportan que la salud del Papa tiene una ligera mejoría y se encuentra estable
Este día el Papa Francisco cumple ya su sexto día internado en el hospital Gemelli, en Roma y posterior a ser diagnosticado con neumonía bilateral, el Vaticano dio a conocer un nuevo informe sobre la salud del Pontífice.
Según el reporte este miércoles 19 de febrero, el Sumo Pontífice se encuentra estable y presenta «una ligera mejoría especialmente en los índices inflamatorios».
Las condiciones clínicas del Papa Francisco se presentan estables. Los análisis de sangre, evaluados por el personal médico, muestran una ligera mejoría, especialmente en los índices inflamatorios.
Hay que recordar que el Santo Padre fue hospitalizado desde el viernes, debido a una neumonía bilateral, pese a esto respira sin la asistencia mecánica, puede levantarse y tiene un corazón que «resiste muy bien», explicó la Santa Sede, esto debido al momento de creciente preocupación por el estado de salud del jesuita de 88 años.
El martes Francisco se sometió a un escáner torácico el cual mostró una neumonía bilateral, detallaron en el nosocomio romano.
Destacan que el Papa continua con un «cuadro clínico complejo» el cual requiere de un tratamiento médico adicional, de acuerdo al parte médico que publicaron la noche del martes.
Recordemos que el Papa argentino sufre de problemas respiratorios y que le extirparon el lóbulo pulmonar derecho durante su juventud, contrajo una «infección polimicrobiana, en un contexto de bronquiectasias y bronquitis asmática» por lo que su tratamiento terapéutico es «complejo».
Este día la Santa Sede se mostró tranquilizadora ya que informó que Francisco de 88 años, «pasó una noche tranquila, se despertó y desayunó», detalló a la prensa el vocero Matteo Bruni.
«El Papa respira solo. Su corazón resiste muy bien», señaló la fuente vaticana.
Meloni visita al Papa Francisco en el nosocomio y dice que «no ha perdido su sentido del humor»
Además la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, visitó este 19 de febrero al Pontífice en el hospital Gemelli de Roma, lugar donde fue ingresado por una neumonía y aseguró que se encontraba «receptivo» y que «no ha perdido su proverbial sentido del humor».
«Estoy muy contenta de haberle encontrado atento y receptivo. Hemos bromeado como siempre», explicó la primera ministra en un comunicado.
De acuerdo a esta fuente, el Papa se puede levantar y sentarse en un sillón. Respira sin asistencia mecánica, sin embargo no se descarta que la use por momentos. Un ejemplo en los últimos días habló por teléfono con la parroquia de Gaza.
Luego del anuncio de la neumonía, infección del tejido pulmonar, potencialmente mortal, ha hecho que la preocupación por la salud del Santo Padre, aumente ya que su estado de salud se pone a prueba debido a una agenda sobrecargada, además de un pesado ritmo de trabajo, el cual se ha negado a aligerar.
Y es que la inquietud incrementó luego de la difusión de falsas informaciones en las redes sociales, en especial en X, que hablaban ya de la muerte del Papa en distintos idiomas.
Después del ingreso el viernes al hospital, el Vaticano canceló sus actividades hasta el miércoles en primer momento, sin embargo el martes anunció la cancelación de la audiencia jubilar del sábado y refirió que el Papa no presidirá la misa dominical.
Energía vital extraordinaria
A pesar de los reiterados problemas de salud de los últimos años, entre estos los de cadera, dolores de rodilla que le obligan a ir en silla de ruedas, operaciones o infecciones respiratorias, Jorge Mario Bergoglio mantiene una agenda muy cargada y dijo que no tenía intención de bajar el ritmo de trabajo.
Y es que sus médicos le insisten en que tiene que frenar un poco sus actividades. Esta es la cuarta hospitalización de Bergoglio en menos de cuatro años, lo que hace que continúe el debate sobre su salud.
Especialmente porque este ingreso se da justo al inicio del año jubilar de la Iglesia católica, lo cual implica una larga lista de eventos, muchos de estos que preside el Papa Francisco.
Días antes de su ingreso al nosocomio, en sus apariciones pública se le noto un tanto débil, con el rostro hinchado, la voz entrecortada y ya había delegado en sus asistentes más de una ocasión la lectura de sus discursos.
De acuerdo al teólogo jesuita Antonio Spadaro, quien se encuentra cercano al Papa, podría estar en el hospital entre dos y tres semanas.
«Está claro que la situación es delicada, pero no vi ninguna forma de alarmismo», afirmó al diario Il Corriere della Sera.
El Obispo de Roma «tiene una energía vital extraordinaria. No es alguien que se descuide, no es un hombre resignado». Es conocido por su ímpetu, Bergoglio prefiere seguir muy activo, sin aligerar su cargada agenda.
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