Jaime Zambrano/Puebla
La Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (Upaep) comenzó la misión del Satélite “Gxiba-1” que consiste en la creación de un nanosatélite que será lanzado al espacio para analizar la dispersión de la ceniza de los volcanes activos de México, el Popocatépetl y el de Colima.
El proyecto se desarrollará luego de que la universidad poblana ganó un concurso internacional convocado por la Oficina de Asuntos del Espacio Exterior de las Naciones Unidas y la Agencia Japonesa de Exploración Aeroespacial (Jaxa).
Eugenio Urrutia Albisua, titular de la Vicerrectoría de Investigación de la Upaep y director General del Proyecto Gxiba, explicó que el proyecto superó seis rondas del concurso KiboCUBE y la misión fue seleccionada entre instituciones de diversos países del mundo.
“El anuncio de la lista de ganadores se dio a conocer este miércoles 16 de febrero, durante la 59ª Sesión del Subcomité Científico y Técnico (STSC) de la Comisión de las Naciones Unidas sobre la Utilización del Espacio Ultraterrestre con Fines Pacíficos (COPUOS)”, explicó.
Destacó que, tras ganar el concurso, el lanzamiento del CubeSat o nanosatélite poblano podrá realizarse desde el Módulo Experimental Japonés “KiboCUBE” de la Estación Espacial Internacional (ISS) a finales del año 2023 o a principios del año 2024.
“Comenzamos con el proyecto Gxiba, cuya misión será el monitoreo especializado de los volcanes activos de México, en particular, el volcán Popocatépetl en el que trabajan más de 40 investigadores y estudiantes”, explicó.
Gxiba-1 será el segundo satélite que desarrolla la Upaep, ya que el primero fue el AzTech Sat-1 que fue lanzado desde la Administración Nacional de la Aeronáutica y del Espacio de Estados Unidos, NASA, por sus siglas en inglés, el 5 de diciembre de 2022, con la misión principal de probar la intercomunicación satelital con la constelación GlobalStar, y que permita mejorar la comunicación en las misiones futuras de los nanosatélites de clase CubeSat.
“Este es el segundo nanosatélite que saldrá al espacio. El primero ya fue desplegado, el AzTech Sat-1. Creemos que esto tiene un impacto importante para la población que vive a los alrededores de los volcanes. El volcán Popocatépetl está activo y entre más información se tenga de los fenómenos naturales, se pueden tomar mejores decisiones. La idea es tener algún grado de predicción de los volcanes, aunque sabemos que es complicado. En un futuro se buscará tener sensores en el volcán, tener la observación por globos y una serie de instrumentos que permitirán monitorearlo”, apuntó.
Por su parte, Héctor Simón Vargas Martínez, director científico del Proyecto Gxiba e investigador de la Upaep, explicó que el nanosatélite, unidad que mide 10 centímetros cúbicos y tiene un peso casi de un kilogramo, cuenta con una cámara y un sistema que permitirá comunicar los datos que vaya obteniendo al dar vueltas a la Tierra.
“Será una unidad de 10 centímetros cúbicos, contará con una tarjeta que es la que resuelve la misión. Tendrá una cámara que estará fotografiando. El satélite llevará el sistema que se desarrolló en el AzTech Sat-1 y que permitirá comunicar datos y bajarlos de manera más ágil en la Upaep. La tarjeta tiene un GPS para localizar al satélite. Vamos a seguir la metodología de la Nasa, la misma que utilizamos con el AzTech Sat-1”, comentó.
Comentó que el desarrollo del proyecto tendrá una duración estimada de dos años antes de su lanzamiento y cada una de las fases tendrá una duración de tres meses, comenzando en la etapa de requerimiento, luego la integración, la fase crítica; más tarde el lanzamiento y la operación de la misión.
Eugenio Urrutia Albisua, titular de la Vicerrectoría de Investigación de la Upaep, comentó que la Agencia Japonesa de Exploración Aeroespacial (Jaxa) aportará las pruebas y el lanzamiento del nanosatélite que se desarrollará en territorio poblano.
Por último, el director General del Proyecto Gxiba explicó que la Upaep trabajará en la construcción del nanosatélite, para lo cual, pondrá en marcha diferentes esquemas con el objetivo de obtener los recursos necesarios.