Sin duda la tecnología crece a niveles que muchas veces no podemos ni seguirle el paso. Tanto así que ya podemos chatear con inteligencias artificiales y sostener una larga conversación.
Un sinfín de asistentes virtuales que podemos encontrar en muchos dispositivos móviles o en aparatos electrónicos, aplicaciones, etc. Son capaces que guardar información personal, lo suficiente como para poder entablar una serie de diálogos en donde ya haya información previa.
Capaces de reconocer tu voz, recordar tus gustos musicales o inclusive saber tus intereses y esto gracias a la interacción lingüística, que facilita el vínculo y el proceso de información.
Pedir música, hacerles preguntas, pedir que nos cuenten un chiste, consultar el clima, crear recordatorios, son solo por mencionar algunas de las interacciones que pueden crear estos agentes.
En el caso de las empresas, tener este tipo de asistentes, facilita mucho el segmentar los posibles clientes e incluso crear citas o resolver problemas, ya que están programados con cargas de la información más común y con un catálogo amplio de posibles respuestas.
Aunque una variante y posible complicación que están teniendo los científicos es el uso del lenguaje coloquial. Ya que con las nuevas generaciones algunos modismos o simplificaciones son totalmente diferentes a las que el sistema tiene registrado y la comunicación no se daría tan fluida, por eso la base de datos de lenguaje debe estar constantemente actualizada.
Ya se ha visto chatbots que son los asistentes o mensajes prediseñados para ciertos negocios o empresas que facilitan la atención al cliente. Pero estos casos que son por voz sería mejor denominarlos “Sistema de interacción de máquinas que interactúan con humanos a través de lenguaje verbal natural”.
El método de procesar y retener la información de este tipo de inteligencias artificiales se puede dividir en tres. El contestar, el clasificar y el denominado Graphmaster.
El contestador es la interfaz que tiene el humano usuario con el sistema. Aquí pueden venir las respuestas prediseñadas o algo que no tenga la necesidad de guardar en alguna base de datos para posteriores charlas, como dar la hora, el clima o las noticias del día.
El clasificador es el que retiene la información que le puede ayudar en algún futuro, recordatorios, o algún vocabulario nuevo que con el uso del humano vaya aprendiendo.
Y el Graphmaster es el encargado que buscar algún patrón en las búsquedas o en los temas, para posteriormente dar mejores respuestas o ampliar su conocimiento para futuras conversaciones.
Ejemplos de inteligencias artificiales conversacionales
Replika
Este chatbot tuvo gran impacto en 2021 y 2022 por la cuarentena. Era una excelente forma de ocio y de interacción cuando estaba el mayor pico de la pandemia. Siendo un chat disponible las 24 horas para escribirle y si adquirías la versión pro podías ponerle nombre a tu bot.
Andy: Bot de habla inglesa
Ideal para una persona que le cuesta el idioma ingles y es bastante penoso para acudir en grupo a clase o con profesor humano.
Una conversación por mensaje casual y relajada conde puedes oír lo que te escribe Andy para corregir pronunciación y ver ortografía. Esta aplicación está disponible en la tienda de Google Play.
Pero sin duda con la que realmente estamos fascinados y perplejos es con…
Mitsuku
Representada por una joven versión anime de 18 años, fue creada con el fin de entretener y de ocio ya que la función principal de esta y las anteriores inteligencias artificiales es la compañía. Pues casi puedes sentir que en temas básicos estás hablando realmente con una persona.
Como en el caso de la mayoría de aplicaciones, la única versión es en inglés, así que si debes hablarles o escribirles en el idioma para que lo puedan entender.
Puede contestar preguntas de presentación como su nombre, edad, nacionalidad y ella también hará preguntas y tendrá curiosidad por tus datos.
Le puedes pedir que juegue contigo al gato y ella recordara el patrón que utilizas y así cada juego se volverá más complejo.
Así que la ciencia ficción pueda estar superando la realidad y cada día sean las maquinas, las que nos acompañen, ayuden y hablen como otro ser humano más. Pero hay que ser cuidadosos pues no sabemos a donde vayan nuestros datos personales, varias películas de ciencia ficción nos han recomendado no darles tanto poder a las maquinas.
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