El arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez Espinosa, cuestionó la decisión de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) que declaró inconstitucional penalizar el aborto y denunció que se está legalizando el crimen contra lo no nacidos, quienes ya son seres humanos.
Al encabezar la misa dominical en la Basílica Catedral de Puebla, inmueble que se mantuvo con un aforo reducido y con medidas sanitarias contra la covid-19, Sánchez Espinosa lamentó que esté imperando una cultura de la muerte y el descarte.
Aseguró que la vida comienza desde la concepción, es decir, desde el momento de la unión entre el espermatozoide y el óvulo, por ello, el interrumpir el embarazo es un crimen contra los no nacidos.
Después de que la Suprema Corte de Justicia de la Nación en México determinó que es inconstitucional penalizar el aborto por considerar que se violan los derechos de las mujeres y personas gestantes, Sánchez Espinosa llamó a los fieles a defender la vida.
“En este mundo que vive la cultura de la muerte, la cultura del descarte, como dice el Papa Francisco, en este ambiente marcado por la impunidad y por la legalización del crimen de los no nacidos, no solo denunciemos estos atentados contra la vida humana, sino que anunciemos que toda vida humana es sagrada porque procede de Dios y sólo él puede disponer de ella”, apuntó.
En su mensaje a los fieles católicos, Sánchez Espinosa resaltó que, a pesar de la decisión del máximo tribunal del país en contra de respetar la vida desde la concepción, la iglesia católica seguirá promoviendo sus principios, seguirá defendiendo a los no nacidos y expresa su respaldo hacia las mujeres.
“Más allá de una resolución en un asunto judicial, la iglesia abraza, respete y promueve la vida del concebido no nacido y apoya y defiende a la mujer en cualquier situación de desamparo”, destacó.
El líder de la grey católica en Puebla resaltó que el primer derecho del ser humano es el de la vida, de lo contrario, no se puede hablar de otras garantías y, por ello, la iglesia seguirá en su defensa desde la concepción y hasta la muerte natural,
No hay ningún otro derecho, queridos hermanos, si no tenemos el derecho fundamental y universal a la vida. Es el primer derecho, el derecho a la vida. El ser humano debe ser respetado y tratado como persona desde el instante de su concepción, por eso, a partir de este momento, se debe reconocer el derecho inviolable a la vida y, muy especialmente, a quien no puede defenderse”, expresó.
Desde el edificio religioso más importante de la arquidiócesis de Puebla, Sánchez Espinosa resaltó que la pandemia de la covid-19 está enseñando la importancia de cuidar la vida desde la concepción y hasta la muerte natural.
“A propósito de la situación de enfermedad y de muerte que estamos viviendo, tenemos que cuidar la salud y la vida. Tenemos que cuidar la salud y la vida de nuestras familias, por eso, no solo denunciemos estos atentados contra la vida humana, sino que anunciemos que todavía humana es sagrada porque procede de Dios y sólo el puede disponer de ella. Por eso, la iglesia es madre y maestra. La iglesia es madre tanto de las mujeres que están embarazadas como de las que sufren cualquier expresión de violencia y opresión así como el concebido y no nacido”, destacó.
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