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Revista Única descubre la historia de Coatlicue.
En esta ocasión hablaremos de la diosa Coatlicue es una deidad que pertenece a la mitología azteca, fue la diosa de la fertilidad, fue venerada como la madre de los dioses. Su nombre significa «La de la falda de serpientes».
Coatlicue está representada en una enorme escultura de piedra, la cual fue encontrada a finales del siglo XVIII en la Plaza Mayor de la Ciudad de México. Tiene garras en sus manos y pies para realizar los sacrificios humanos, también se aprecia su collar de corazones y manos. Por esto se le llamó «la comedora de inmundicias».
Coatlicue o Tonantzin, nuestra madre.
Nos cuenta la leyenda mexica que Coatlicue es la madre de la tierra, de las estrellas, la luna y el sol. Muchos le llaman también Tonantzin, la madre de todos los dioses, la deidad que representa la vida, la muerte y la fertilidad.
Se dice que Coatlicue tuvo 400 hijos conocidos como Centzon Huitznáhuac y una hija la que se llamaba Coyolxauhqui.
Un día, mientras Coatlicue barría, cayó del cielo una pluma y al guardarla entre su vientre quedó embarazada. Sus hijos, se sintieron deshonrados y para limpiar la deshonra buscaron la forma de matar a su madre.
Los Centzon Huitznáhuac y Coyolxauhqui, no esperaban el nacimiento de su hermano, Huitzilopochtli, quien se convirtió en guerrero y defendió a su madre, les dio muerte a los Centzon Huitznáhuac, quienes se convirtieron en las estrellas.
A Coyolxauhqui la decapitó e hizo rodar su cuerpo por el Coatepétl (cerro de la serpiente, la montaña sagrada de los mexicas) y así esta se convirtió en la Luna.
Huitzilopochtli se convirtió en el dios del Sol en todo el Altiplano central.
A la diosa se le representa con la cabeza bicéfala de serpientes coralillo símbolo de la sangre y la fertilidad, los pechos caídos, que representan la figura materna, que ha amamantado y criado a cientos de sus hijos.
Las garra en sus manos y pies le servían para devorar toda la injusticia y su collar adornado con manos, corazones y una cabeza representan los sacrificios que se le realizaban esa época.
Finalmente la falda llena de serpientes, hace alusión a su nombre con el que se le representa como dadora de vida y al mismo tiempo devoradora de la humanidad.
“Si la Coatlicue esta decapitada es porque representan a la Tierra desgarrada en el origen del tiempo, a la tierra que reclama sangre y corazones como lo simboliza la falda de serpiente, la Tierra que devora los hombres, como lo indican los brazos levantados y las garras amenazadoras, el cuerpo listo a saltar, el collar de trofeos; manos corazones y cabezas de muerte.
La diosa muere dando vida; es por tanto una mujer heroica vestida de insignias propias de los guerreros. Si los flujos de sangre brotando del cuello se transforman en serpientes, es porque las serpientes son la vida que se renueva, la fertilidad.” Michel Graulich.
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