Francisco Martínez, obispo auxiliar de Puebla, elevó una oración por el eterno descanso de la pequeña Camila, la niña de solo ocho años de edad que fue asesinada en Taxco Guerrero.
Camila hace unos días salió de su casa para ir a jugar con su amiga; sin embargo ya no regresó. La mamá de la pequeña recibió llamadas exigiéndole dinero por los secuestradores, sin embargo la pequeña apareció muerta y con signo de violencia sexual.
Ello provocó una un linchamiento en contra de los posibles responsables, entre ellos una mujer que perdió la vida en esta agresión masiva.
Por otra parte, en la Catedral de Puebla, Francisco Martínez Castillo, Obispo Auxiliar de Puebla, oficio la misa de Pascua de Resurrección.
En este marco destacó que la Resurrección de Nuestro Señor Jesucristo debe representar para nosotros los católicos una renovación y conversión de nuestro ser, para tener una mejor vida y ser mejores con nuestros hermanos.
«Esta Resurrección es una oportunidad para todos nosotros para reconvertirnos, para ser mejores personas con nosotros mismos, con nuestros hermanos, con nuestra familia» aseveró.
Lo anterior durante su homilia en la cual destacó que Jesucristo venció a la muerte y resucitado se encuentra entre nosotros para continuar salvando a la humanidad.
«Este Domingo de Resurrección, celebramos el triunfo de Jesús, celebremos la vida y la presencia de Dios Nuestro Señor entre nosotros» refirió.
Martínez Castillo destacó que con la presencia de Jesucristo resucitado, es un triunfo sobre todas las adversidades de sufrimiento e injusticias que nos han lastima
