Como un rayito de esperanza y amor, así nos cayó el encuentro entre Olimpia Coral Melo Cruz y Malala Yousafzai.
Hay imágenes que dicen más que mil palabras, tal es el caso de las fotografía que Olimpia Coral compartió en sus redes sociales.
Fue durante la Primera Cumbre Internacional de los Derechos Humanos, celebrada el 30 de noviembre en Nuevo León, México, que Malala y Olimpia se encontraron.
Sobre Malala…
En 2012, Malala Yousafzai sobrevivió a un ataque talibán por defender el derecho a la educación en Pakistán, por lo que se ha convertido en una voz poderosa para el cambio.
Su valentía inspiró a millones y llevó a la ratificación del primer Proyecto de Ley sobre el Derecho a una Educación Gratuita y Obligatoria en Pakistán.
Junto a su padre, Ziauddin, fundó el Fondo Malala, promoviendo la conciencia sobre la importancia de la educación de las niñas y su empoderamiento.
Reconocida con el Premio Nobel de la Paz en 2014, Malala continúa siendo una defensora incansable del acceso a la educación y los derechos humanos.
Sobre Olimpia…
Durante más de una década, la activista Olimpia Coral Melo ha inspirado e impulsado que el acoso sexual y la violencia digitales sean penados.
Y, gracias a su lucha, una a la que más mujeres se han sumado al ver su ejemplo de valentía, hoy tenemos la Ley Olimpia.
Olimpia es mexicana, es poblana, es huauchinanguense y nos llena de orgullo saber que después de todas las injusticias que vivió se levantó, luchó y nunca se rindió.
Su ejemplo de lucha nos llena de ganas por continuar aquí sin bajar la voz nunca más, nos hace saber que no estamos solas.
En 2021, Olimpia Coral fue considerada como una de las personas más influyentes del mundo y la única mexicana elegida por la revista Time.
Primera Cumbre Internacional de los Derechos Humanos
Finalmente, a través de redes sociales, Olimpia Coral compartió algunas fotografía junto a Malala, esto, junto a un conmovedor mensaje:
Son 14,131 kilómetros de Distancia de Pakistán a Huauchinango. Era casi imposible que nos encontráramos y lo hicimos.
Años atrás, al otro lado del mundo había una niña luchando por su derecho a la educación, en una realidad en donde las mujeres tienen que morir por ello. Hoy, esa niña es premio Nobel de la Paz.
Ella, aferrándose a su causa, sobrevivió a un régimen misógino y sangriento. Acá en México y allá en el Sur del Continente Asiático nos une el amor y la lucha de ser mujeres.
Entonces me tocó el pecho, casi a la altura del corazón y Malala Yousafzai me dijo:
-We are not united by the violence we experience, we are united by love-.
¡Qué vivan las mujeres, que vivan las que luchan!
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