No he asistido a alguna noche mexicana en la que no haya pozole. Este caldito de origen prehispánico es, hoy en día, uno de los platillos más representativos de la gastronomía mexicana.
Y si a ti también te gusta, debes saber que recientemente el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) publicó a través de su cuenta oficial de Twitter que “una cazuela de pozole no engorda, engordas tú si te comes dos”.
Así como lo lees: ¡es saludable comer pozole! Hay que recordar que una taza y media (o plato) de esta delicia, contiene aproximadamente 60 gramos de carne; se recomienda no exceder los 100 gramos de maíz y agregar verdura al gusto, que puede ser lechuga, cebolla, rábano, chile y limón, por lo que es considerado como una comida completa.
El IMSS asegura que lo único a evitar son el chicharrón, tacos, tostadas con crema, entre otros complementos que solemos agregarle de manera extraordinaria a este platillo y que pueden hacernos subir de peso.
Fuente: Cocina Delirante