La misa Crismal en la Basílica Catedral donde el arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez Espinosa, bendijo los Santos Oleos que serán distribuidos a todas las parroquias para administrar los sacramentos, fue dedicada a los 10 mil 839 muertos en Puebla por covid-19 y a los 45 sacerdotes que perdieron la vida en el último año por diferentes razones.
Al iniciar la celebración religiosa, Sánchez Espinosa envió un mensaje de solidaridad para todas las familias poblanas que registraron la pérdida de seres queridos en el marco de la pandemia y resaltó la colocación de 45 veladoras en recuerdo de los sacerdotes que perdieron la vida, entre ellos, 30 diocesanos y 15 religiosos.
“Nos reunimos como iglesia diocesana para celebrar nuestra misa Crismal, es una misa propia del jueves santo, pero por motivos pastorales, trasladada a este día, al martes santo (…). Recordamos en nuestra oración a todos nuestros familiares, amigos, conocidos que han muerto en este año de pandemia, en especial, recordemos a los 45 sacerdotes que han fallecido en nuestra arquidiócesis, 30 de nuestra arquidiócesis y 15 religiosos, entre ellos, dos dominicos, dos escolapios, un jesuita, tres misioneros del espíritu santo y siete lasallistas”, resaltó Sánchez Espinosa.
Entre los sacerdotes que perdieron la vida y que formaban parte del clero diocesano, seis era canónigos, seis formaban parte del cabildo de la Basílica Catedral y el resto eran profesores del Seminario Palafoxiano y titulares de diferentes parroquias y templos.
“Desde sacerdotes ya muy mayores de edad hasta sacerdotes de edad medida y sacerdotes jóvenes con cinco, seis años de ordenados. A todos ellos, los recordamos en nuestra celebración y, por eso, estas 45 ceras que arden como un memorial de ellos. Desde el cielo nos están acompañando”, apuntó.
Sánchez Espinosa explicó que la misa crismal también está dedicada a los más de 200 mil mexicanos, entre ellos, más de 10 mil poblanos que perdieron la vida ante la pandemia del covid-19 que está dejando múltiples complicaciones a las familias.
“Junto con los sacerdotes, hacemos recuerdo de nuestros laicos, nuestros queridos laicos de los distintos grupos parroquiales que han fallecido, de nuestros familiares y amigos, conocidos, vecinos de nuestra comunidad. A todos ellos, los tenemos presentes en nuestra oración. En esta pena tan grande de tantos hermanos que han fallecido, más de 200 mil en nuestra patria, más de 10 mil en Puebla”, apuntó Sánchez Espinosa.
De acuerdo con la arquidiócesis de Puebla, en la lista de sacerdotes poblanos que perdieron la vida luego de dar positivo a las pruebas de covid-19 se encuentran: José Guadalupe Sanguino Fuentes, quien tenía 85 años de edad; Valentín Ramírez Tlaque, 68 años de edad; Álvaro Ramírez Hernández, 97 años de edad; Joaquín Fausto Silva Omaña, 59 años de edad; y Juan Francisco Espino Godínez, 54 años de edad.
La lista continúa con Rafael Amaro Goiz, 54 años de edad; Adán Soto Aguilar, 76 años de edad; José Armando Guillermo López Téllez, 63 años de edad; Rubén Mendoza González, 39 años de edad; Víctor Castillo Deonate, de 35 años de edad; y recientemente, Froylán González Pérez, de 81 años de edad, quien era párroco de Nuestra Señora de la Candelaria y Guadalupe, en el barrio de Xonaca, en la capital del estado.
En la arquidiócesis de Puebla, las dos primeras muertes de religiosos víctimas de coronavirus se registraron el 15 de abril de 2020: José Guadalupe Sanguino Fuentes y Valentín Ramírez Tlaque, quienes tenían 85 y 68 años de edad, respectivamente, y ya estaban en retiro.