Graciela Amanda Figueroa Ruiz y Miguel Jiménez Moyotl, estudiantes de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), conquistaron sus pases para participar como parte de la selección mexicana en el World Kickboxing Championships, Budapest 2024, en Hungría.
Los dos estudiantes de la máxima casa de estudios del estado de Puebla forman parte de los 42 representantes mexicanos que competirán en la justa mundial que reúne a tres mil atletas de 68 países.
Graciela Amanda Figueroa destaca en control, enfoque y rapidez en el contraataque; mientras que Miguel Jiménez domina su técnica para despistar al adversario, al lanzar una patada a la pierna que cambia con rapidez a la cabeza.
Campeones nacionales y estatales
Graciela Amanda Figueroa Ruiz y Miguel Jiménez Moyotl, estudiantes de la Preparatoria Regional Simón Bolívar, de Atlixco, de la BUAP, competirán en la categoría junior, en el Campeonato Mundial de Kickboxing, en Hungría, justa que se desarrollará desde el pasado fin de semana y hasta este 1 de septiembre.
Graciela Amanda Figueroa Ruiz suma cinco años siendo campeonatos nacionales en kickboxing; mientras que Miguel Jiménez Moyotl lleva cuatro años consecutivos siendo el mejor en su deporte en el país.
Graciela Amanda Figueroa Ruiz, estudiante del tercer semestre de la Preparatoria Regional Simón Bolívar, explicó que a los cinco años comenzó a practicar el kickboxing, deporte en el que encontró valores, disciplina, trabajo en equipo, autoestima y seguridad.
“Amo el kickboxing porque saca en mí lo que no ocurre en otra esfera de mi vida: ‘Amanda guerrera, Amanda luchando’, esto me llena de mucho orgullo. El kickboxing me ha cambiado la vida: para mí es un estilo de vida, me siento muy feliz, agradecida con mi familia y con mis entrenadores; todos me han apoyado en este camino”, comentó.
Estudiante de la BUAP pasó del futbol al kickboxing
Miguel Jiménez Moyotl, alumno de quinto semestre de la Preparatoria Regional Simón Bolívar de la BUAP, resaltó que comenzó a practicar futbol a los cinco años; sin embargo, a los 11 años, optó por el kickboxing.
“Yo era portero, no era muy bueno jugando, pero me gustaba el deporte. A los 11 años, a una academia de kickboxing. Yo insistí en ir, en la segunda clase me llevó mi mamá y me gustó; allí cambió mi vida: al entrenar sentí esa pasión por dentro. He aprendido a valorar las cosas, a tener disciplina y apreciar que la unión de las personas pesa más que un individuo”, explicó.
Jiménez Moyotl, seleccionado nacional mexicano, explicó que siente un compromiso con su familia, entrenadores y amigos que lo están apoyando, por lo cual, se enfoca en alcanzar lo máximo en el deporte.
“El actual campeón del mundo lo es porque no se ha enfrentado a mí. Hay alguien mejor y estamos dispuestos a demostrarlo. Somos guerreros, porque somos mexicanos y lo llevamos en la sangre; somos BUAP, somos lobos”.
