La carga sin cables en los dispositivos, sobre todo en teléfonos móviles, es una de las tendencias a las que se apuntan los fabricantes cuando hay que rellenar las especificaciones, sobre todo de los modelos de alta gama. Cargar sin cables pero sin depender de una base es un concepto que quiere acabar la tecnología Wi-Charge.
Y poco a poco aparecen soluciones que aprovechan las posibilidades que nos permite la carga sin cables a larga distancia por medio de rayo láser. Es la base sobre la que ha crecido este cargador de largo alcance, el R1, un dispositivo que se conecta a un enchufe o a la rosca de una bombilla y permite cargar dispositivos que estén a gran distancia.
Hasta 9 metros de distancia
El cargador inalámbrico R1 cuenta con un rango de acción que permite la carga de dispositivos compatibles que se encuentren hasta 9 metros de distancia. Un dispositivo que dada su fácil colocación, hace que pueda aprovechar casi cualquier lugar de la casa para ser colocado.
Sin necesidad de cambiar baterías o de utilizar cables, este pequeño aparato que recuerda en sus formas a un altavoz inteligente, se encarga de detectar los dispositivos compatibles e iniciar la transferencia de energía cuando estos se encuentren en su radio de acción.
Para lograrlo se sirve de la tecnología de rayos láser en frecuencias de infrarrojo AirCord. Y es capaz de ofrecer energía para que se puedan cargar a la vez varios dispositivos, entendiendo que por regla general se tratará de dispositivos con baterías de tamaño contenido.
El dispositivo se está enviando a aquellos usuarios que participaron en la fase inicial del programa y se espera que llegue a nivel global al mercado a lo largo de 2020.
