Voto de la mujer. Este 3 de julio se cumplen 63 años de la primera vez que la mujer en México ejerció su derecho a votar.
Mujeres como Hermila Galindo, Elvia Carrillo Puerto, Juan Belén Gutiérrez de Mendoza, entre muchas otras, se distinguieron por su infatigable lucha para que se reconociera el derecho de la mujer mexicana a votar y ser electas.
Fue el 3 de julio de 1955, hace 63 años, que las mujeres en México sufragaron por primera vez en una elección federal, la de diputados a la XLIII Legislatura.
Lo anterior ocurrió casi dos años después de que el entonces presidente Adolfo Ruiz Cortines cumpliera su promesa de campaña. Una vez superado el trámite legislativo, publicó en el Diario Oficial (17 de octubre de 1953) el nuevo Artículo 34 Constitucional, para que las mexicanas gozaran de la ciudadanía plena.
Antecedente
La emisión del voto femenino conllevó una larga y contundente lucha, que tiene presencia desde 1884 y 1887, con la primera publicación de la revista femenina Violetas del Anáhuac.
Fue hasta 1952, que más de 20 mil mujeres protestaron en el Parque 18 de marzo de la Ciudad de México, para reclamar lo que el presidente Adolfo Ruiz Cortines, había prometido en su campaña presidencia, tener en la Constitución el derecho a votar y ser electas.
Pasaron algunos meses para que el entonces presidente Adolfo Ruiz Cortines, promulgará el 17 de octubre de 1953, las reformas constitucionales al artículo 34 que otorgaron el voto a las mujeres en el ámbito federal.
“Son ciudadanos de la República los varones y las mujeres que, teniendo la calidad de mexicanos, reúnan, además, los siguientes requisitos: haber cumplido 18 años, siendo casados, o 21 si no lo son, y tener un modo honesto de vivir”.
En ese tiempo, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) había llamado a los países miembros a reconocer los derechos políticos de las mujeres, puesto que no podía considerarse democrático a un país si más de la mitad de su población no participaba en la toma de decisiones.
Es importante mencionar que México fue de los últimos seis países en legislar el voto de las mujeres y gran parte se debió a la presión internacional de la ONU, quien en 1952 estableció que ningún país decirse democrático sino tenía la ciudadanía más de la mitad de su población.
Cabe recordar que ese mismo proyecto había sido introducido 15 años antes (julio de 1938) por el general Lázaro Cárdenas del Río, durante su Presidencia; sin embargo, aun cuando la propuesta fue aceptada y enviada a las legislaciones locales para su posterior aprobación, no se hizo el cómputo final, por lo que nunca se le dio el trámite para ser promulgada.