A diario el tema de la educación es una constante en nuestras vidas. Desde que los niños y niñas vayan a clases hasta que las y los universitarios egresen con la calidad para poder insertarse en el mundo laboral y alcanzar salarios dignos a través de su desarrollo.
Y en este entorno va implícita esa formación y educación desde casa, donde hoy más que nunca los buenos valores deben ser reforzados para cambiar esta sociedad tan agresiva, tan agitada, en ocasiones tan violenta, a consideración propia, por ahí se debe empezar…
Pero ¿Cómo modificar el contexto social a través de la educación?
Por principio a través de las políticas se debe garantizar las líneas educativas a implementarse, con un seguimiento planeado, ajustándose a los cambios sociales como es en el área de la tecnología.
Lo fundamental es incrementar la eficiencia terminal del inicio al término de la formación académica-educativa (desde la primaria hasta la universidad). En este sentido recordemos que de cada 100 menores que ingresan a la primaria, solamente 26 terminan los estudios superiores.
¿Qué es lo que pasa con los 74 restantes?, la respuesta es fácil: abandonan sus estudios en el trayecto de la primaria, secundaria, bachillerato e inclusive en el propio nivel superior. La causa principal es el tema económico, éste donde las familias ya no cuentan con el dinero para pagar transporte, cuotas escolares…
Otro dato interesante es que sólo 8 de cada 100 alumnos que comienzan sus estudios en la universidad los concluye.
Investigadores en el área socioeducativa como Álvaro Bustamante Rojas, de la Corporación de capacitación y desarrollo educacional Alcatipay, consideran que “si bien la educación emerge como un fenómeno social no sólo por sus fines (integrar al niño al mundo-sociedad), sino también porque aporta con su ejercicio a la conformación de la realidad social y cultural de los distintos grupos humanos”.
De ahí la importancia de la educación y la respuesta de si ¿Será la educación la salvación para México?, y para el mundo en general.
Ya lo decía Benjamín Franklin: “Una inversión en conocimiento paga el mejor interés”
Como sociedad, como padres de familia, como instituciones y organizaciones inmersas en una comunidad global, tenemos el compromiso y responsabilidad de formar y educar para alcanzar mejores condiciones de vida y desencadenar mejor salud, salarios, medio ambiente, más desarrollo, menos imprudencias y ocurrencias…
Bien lo dice Fátima Masse, directora de Sociedad incluyente en el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), “estudiar una carrera se debe ver como una inversión, en la cual se invierte tiempo dinero y esfuerzo, pero a cambio se pueden obtener grandes beneficios al adquirir habilidades técnicas y profesionales, aspirar a empleos mejor remunerados y de mayor calidad”.
“La educación es el único camino para escapar de la esclavitud mental: Frederick Douglass”
