Realiza tu propia pintura blanca para la cara, ¡es muy sencillo!
Puedes recurrir a objetos que todos tenemos en casa, o realizar mezclas de alimentos cotidianos que crearán la masilla perfecta para conseguir la ansiada pintura blanca para la cara.
Usa como base una crema hidratante
Una de las maneras más populares de conseguir el maquillaje blanco es usando una base de crema hidratante o manteca blanca.
Los ingredientes que te harán falta son tres cucharas de harina, una cucharada de maizena para espesar, dos cucharadas de tu crema hidratante diaria y seis gotitas de glicerina líquida.
El primer paso para crear la pintura es mezclar la harina con la maizena en un recipiente pequeño.
Seguidamente añade las dos cucharadas de tu crema, con la ayuda de un tenedor para removerlo, hasta que de lugar a un lo más homogénea posible.
El siguiente paso a seguir es añadir las seis gotas de glicerina líquida y removerlo bien para que se adhiera correctamente.
El resultado tiene que ser una crema como la tuya pero más fluida, no tan espesa como la original.
Cuando quede de esta manera ya podrás comenzar a aplicártelá con una esponja y la ayuda de unos pinceles de maquillaje de punta redonda para las zonas más pequeñas de la cara como la nariz y el contorno de los ojos.
Debes tener en cuenta que debes tapar de manera exacta todas las zonas de tu rostro para que el make up blanco tenga un buen resultado.
Vaselina, una gran aliada
Usar la vaselina como base del maquillaje blanco es una de las mejores opciones.
Pues crea una de las mejores texturas, y además se adhiere de mejor manera al rostro creando una base lisa y perfectamente homogénea.
Para esta opción necesitas dos cucharas de manteca, tres de harina y media cucharada de vaselina.
En un pequeño recipiente mezcla la vaselina con las cucharas de manteca.
En el caso de querer conseguir una base de otro color específico puedes usar colorante alimenticio y añadirlo en este paso.
Debido a la consistencia de este maquillaje no te puedes olvidar de adherirlo en este paso, más tarde será más complicado mezclarlo de manera homogénea.
El siguiente paso es añadir la harina poco a poco mientras se mezcla para que se quede una masa uniforme sin grumos ni imperfecciones.
Si el resultado del color no es el que buscabas, añádele más harina para que se aclare o más colorante para que sea más brillante.
La textura debe ser dura gracias a la vaselina para poder manipularla lo mejor posible.
Cuando tenga estas características ya está lista para que te la apliques y crees el maquillaje perfecto. Con los ojos negros y un pintalabios rojo pasión será el make up perfecto de geisha.
Estilo coreano
El estilo coreano usa como principales ingredientes el polvo de talco para bebés, crema hidratante y el agua, como aliados para crear un maquillaje mate y duradero.
Este es el procedimiento más sencillo, y el que mejor resultados da.
Debes coger una cucharada y media de tu crema hidratante diaria y tres cucharadas de polvos de talco.
Mezcla ambos ingredientes hasta que quede una masa lo más homogénea posible y añade poco a poco agua hasta que consigas que se quede un make up un poco más fluido.
Lo bueno de este maquillaje es que puedes escoger con mayor libertad la espesura de la mezcla, y por ello escogerás el tipo que mejor se te dé.
Más espeso o un poco más líquido, debes esparcirlo por tu cara con una esponja facial esparciendo abundantemente el maquillaje que has realizado.
Para Halloween puedes optar por ponerte detalles de cicatrices con un lápiz negro y unas sombras moradas para los ojos.
También puedes maquillarte por encima con tu rutina diaria, y pintarte con un pintalabios rojo varias gotitas a modo de sangre, y tendrás un maquillaje de vampiresa de lo más sencillo y a la par natural.
Con información de Bekia.
