Foto de portada: Francisca Siza
En todas las narrativas del folclore mexicano, desde Mayahuel hasta Máyatl, se destaca la presencia femenina en el inicio del mezcal. Entonces, ¿por qué durante tanto tiempo su contribución a la industria mezcalera fue ignorada y menospreciada?
Hace más de dos décadas, en la asociación Mujeres del Mezcal y Maguey de México, se formularon esa misma pregunta. Decidieron tomar las riendas como propietarias, productoras y expertas en mezcal, sin depender de la figura masculina de padre, esposo, hermano o cualquier hombre que las avalara.
Yolanda Ruíz, fundadora y presidenta nacional de la asociación platicó para un importante periódico nacional, cómo el sexismo tiene lugar hasta en el agave.
“En nuestro país, cada historia, en cada estado, tiene puntos o conexiones similares de las mujeres que siempre estuvieron presentes, mas nunca visibles. Hace 21 años, nos dijeron que estábamos equivocadas en hacer un movimiento de mujeres en los destilados, que estábamos locas”, dijo.
Comenzaron inicialmente dos personas, luego aumentaron a cinco, y posteriormente a veinte; así continuaron hasta establecer lazos en todo México.
Durante los últimos doce años, ella ha viajado por el país en busca de mujeres, consolidando las asociaciones y promoviendo la conexión entre las maestras mezcaleras.
La marca «Mujeres del Mezcal» es un sello colectivo que se otorga a aquellas que no cuentan con uno propio, permitiéndoles comercializar sus destilados.
En cada estado de la república, la asociación cuenta con una presidenta local encargada de buscar emprendedoras destiladoras en todas las comunidades. Una vez formado el equipo, se redacta un nuevo capítulo, marcando así la distinción entre los diversos distritos estatales de la asociación: Capítulo Oaxaca, Capítulo Michoacán, Capítulo Puebla, entre otros.
Precisamente en estos capítulos, las historias de resiliencia resuenan en los palenques. Yolanda comparte la historia de una de las mujeres fundadoras que, tras sobrevivir a un intento de feminicidio, logró liderar y destacar a sus compañeras como expertas y productoras de mezcal.
Luzma, secretaria general de la asociación, sufrió dos intentos de feminicidio por parte de hombres destiladores, pues ella luchaba en ese entonces por la incorporación a más procesos de certificación.
Cada mujer que forma parte de esta red cuenta con su propia historia admirable. Son diversas las historias de emancipación femenina que existen dentro de las Mujeres del Mezcal.
Antiguas leyendas
Yolanda platicó en la misma entrevista que, además del machismo interiorizado, antiguamente se creía que una mujer que estuviera menstruando avinagraba el mezcal si se acercaba al palenque.
Fue por ello que, esta excusa, ya desmentida, hizo que las familias mezcaleras invisibilizaran a las mujeres, dejándolas en el interior de la casa sin posibilidad de aprender, ni trabajar.
Mujeres interesadas por la sostenibilidad
La conexión y la sororidad con la tierra son elementos distintivos del mezcal elaborado por mujeres, capaces de destacarlo entre otros.
El cambio climático se ha convertido en un tema prioritario para las mujeres dedicadas a la producción de mezcal, quienes están participando en capacitaciones sobre la gestión adecuada de las vinazas.
Estas son un subproducto líquido que, al no ser tratado correctamente, contamina tanto el agua como el suelo, convirtiéndose en una sustancia nociva.
En regiones como Guerrero y Michoacán, investigadoras están trabajando en la eliminación del uso de glifosato e insecticidas en la producción de agave.
En su lugar, están promoviendo el empleo de organismos vivos para nutrir y proteger el agave, con el objetivo de avanzar hacia la producción de mezcal orgánico.
El documental
Uno de los proyectos más ambiciosos de la asociación fue la creación de su documental «Las Hijas del Maguey», aún pendiente de su estreno, bajo la dirección de Francisca Siza y la producción de Gautier Heins.
Esta producción audiovisual recorrió trece estados del país, narrando la historia de las presidentas mezcaleras en capítulos que abarcan desde sus certificaciones y premios hasta sus batallas y reconocimientos por parte de otras mujeres.
Este registro ha sido galardonado en diversos festivales internacionales, incluyendo Berlín, Estocolmo, Los Ángeles, el Festival Internacional Puerto Aventuras de México y la séptima edición del festival de mujeres directoras.
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