La justicia de Múnich ha cerrado la investigación sobre Ratzinger acusado de encubrir cientos de abusos a niños
El pasado diciembre murió Joseph Ratzinger, mejor conocido como el papa emérito Benedicto XVI, mismo que renunció al pontificado en 2013. El Santo Padre, siempre fue un papa polémico desde su nombramiento como el sucesor de San Pedro, por su origen alemán y su posible participación en las juventudes hitlerianas.
El papa emérito mantuvo una acusación de encubrimiento de sacerdotes en las diócesis de Múnich y Freising de abusos a menores de edad. Según las acusaciones que pesaban en su contra, cuando era arzobispo de ambas ciudades antes mencionada Ratzinger supo de abusos y no hizo nada.
Una vez que falleció el papa emérito la investigación continuó en su contra, sin embargo, en días recientes la fiscalía de la ciudad de Múnich cerro el caso.
Cabe mencionar que según información de las autoridades existen 497 denuncias sobre igual número de víctimas durante más de tres décadas. Según las investigaciones más de 173 sacerdotes estarían involucrados, una gran parte de ellos bajo el arzobispado de Ratzinger.
Las acusaciones sobre el papa emérito siempre fueron de encubrimiento de cientos de sacerdotes y hombres relacionados a la iglesia. Sin embargo, la justicia alemana ha cerrado el caso debido a la falta de pruebas reales sobre las sospechas y en su mayoría las ha calificado de rumores.
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