El deseo cambia a lo largo de la vida, no se mantiene estable. Sin embargo, en determinados momentos puede convertirse en un problema que afecta a la relación en pareja. La buena noticia es que este problema tiene solución.
La clave para solucionarlo empieza por mantener tiempo de calidad en pareja.
“Yo empezaría por reservar tiempo para la pareja, para estar en intimidad, parar un poco, sin estrés, sin otras cosas que hacer”, especifica María de Elena Amor, psicóloga y sexóloga en Lasexología.com.
Diana Lozano, psicóloga y sexóloga en Centro TAP. Tratamiento Avanzado Psicológico, va más allá: ese tiempo de calidad implica estar de verdad.
“Hay algo que se ha puesto muy de moda en los últimos tiempos, el mindfulness, que tiene que ver con estar en el presente, con la experiencia plena. En el deseo no es tanto lo que pasa sino que cuando pasa, las personas no están en lo que tienen que estar. Si efectivamente vivo una vorágine de vida, voy a mil por hora, tengo la cabeza puesta en mil problemas que hay que resolver, aunque tenga un encuentro erótico, si yo no estoy en clave erótica, si yo no tengo en la cabeza la atención y todos mis sentidos conectados con ese momento, evidentemente no lo voy a vivir igual”, señala.
Lozano indica que el deseo puede ser tremendamente complejo, pero también muy fácil. “No es más que las ganas de repetir aquellas cosas que nos traen consecuencias positivas. Si yo estoy a lo que estoy, y tengo claro gracias a una buena comunicación en pareja que no estoy haciendo nada que no quiera hacer, evidentemente, estar presente de verdad va a ser de muchísima utilidad”, señala.
¿Hay que agendar los encuentros?
Una de las opciones para mantener esa llama viva y que el deseo no decaiga es dedicar tiempo y volver a tener citas en pareja. “A veces hay que reservarnos para tener un ratito e ir calentando motores sin tener ninguna expectativa. Simplemente vamos a apartar un tiempo para estar disfrutando. Un punto importante es no tener expectativas, de esa manera evitamos la frustración”, indica Silvia Pérez, terapeuta y sexóloga portavoz de la Fundación Sexpol, quien señala que el deseo no se puede planear, pero el encuentro sí.
“Debe planearse. A todos nos cuesta encontrar huecos para quedar con una amiga, tomar café y ponernos al día. Ese esfuerzo se tiene que trasladar a la pareja, hay que cuidar la relación, tener una cita aunque vivamos juntos, sin distracciones para cultivar una buena comunicación y que surja el deseo«, añade Pérez.
Atención a la comunicación
Otro de los aspectos en los que hacen hincapié las expertas es en la comunicación en pareja. “Si la forma de comunicarse de la pareja es siempre, te dejas todo por el medio o estoy hasta las narices de que no saques la basura, probablemente eso va a influir en que haya un ambiente más negativo; lo que también va a repercutir en que a lo mejor no le apetezca demasiado mantener relaciones sexuales”, advierte De Elena.
¿La solución? Cambiar esas pautas de comunicación que pueden ser un poco negativas por otras más asertivas como Cariño, te importaría recoger esto que has dejado aquí. “Unas pautas de comunicación reforzantes, que puedan generar unas actitudes más positivas, probablemente influyan en que tengamos una mejor predisposición a estar a buenas con nuestra pareja, a que surja el deseo y tener una buena convivencia, un buen espacio para ello”.
Por último, las expertas insisten en ser flexibles. “Si la fórmula de afrontar el problema es rígida y desde la insistencia, generalmente lo vamos a problematizar mucho más. Es importante que la pareja entienda que hay situaciones que pueden no apetecer en un determinado momento, comunicarlo y buscar otra alternativa”, concluye Lozano.
Fuente: CuidatePlus.