Ya sea que estés haciendo ejercicio, dando un paseo, o sentado frente a tu escritorio en la oficina, la buena postura es un deber.
1. Mantienes una mala postura.
Ya sea que estés haciendo ejercicio, dando un paseo, o sentado frente a tu escritorio en la oficina, la buena postura es un deber. Por otro lado, la mala postura puede remodelar tu espina y provocarte espalda encorvada permanentemente.
Para incorporar a tu régimen de ejercicio una apariencia alineada que desafíe la edad, practica con un entrenador que esté revisando tu postura.
Si el problema es la conciencia que tienes sobre tu porte, entra a clases de yoga, pilates, o ballet para así aprender los principios de estar alineado.
2. Permaneces exclusivamente en cardio.
Mientras que cardio es un excelente hábito que adquirir, el entrenamiento de fuerza es lo que va a tornear tus músculos y ayúdate a quemar calorías incluso cuando no estás ejercitándote.
Es especialmente importante para los adultos; de acuerdo a una encuesta Abbott-AARP, muchos americanos al llegar a sus 50’s carecen de fuerza adecuada.
“A pesar de que muchos adultos reportaron en la encuesta hacer ejercicio, cardio era realmente el preferido. Sólo una cuarta parte de esas personas está levantando pesas actualmente”, dice la experta en dietas Tiffany Dewitt.
“La evidencia ha mostrado que hacer esos ejercicios te ayuda a mantener tus músculos”. Por lo tanto, manteniendo tus músculos lucirás joven.
3. Descuidas tu pelvis.
La pelvis puede que no sea lo primero en lo que piensas cuando consideras hacer ejercicio, pero eso no lo hace menos importante.
“Descuida la parte baja de tu pelvis y podrías terminar con esa sutil y redonda panza que muchas mujeres desarrollan después de la mediana edad, al igual que incontinencia urinaria”, dijo Guy Andrews, Especialista Certificado en Fuerza y Condición, para Prevention.
Recomienda mantener todo firme con tres grupos de 10 contracciones de músculo pélvico (Kegel), tres veces al día, cada día.
4. Dejas fuera movimientos poderosos.
¿Has notado cómo entre más viejo eres, más lento es tu tiempo de reacción? Mantente fuerte incorporando movimientos poderosos a tu rutina de ejercicio.
Levantando peso pesado (opuesto levantar cosas livianas para más repeticiones), dando saltos explosivos, y corriendo teniendo en mente la velocidad, esto formará una contracción rápida en las fibras de tus músculos y tus reacciones serán más rápidas.
5. Nunca te des-estresas.
Mantén un brillo joven con actividades relajantes como el yoga o las artes marciales.
