Ricardo Caballero de la Rosa
No el azar corruptible de las cosas
no aquella continuidad triste de fondo
no las sombras que cubren pieles
no la hiriente homogeneidad
sino la vanidad que nos mira
la ira de una bondad que calma
la palabra ferviente y clara
la voz de la elocuencia histórica
la astucia para una vida plena
el abanico que entroniza caricia
el destello que mueve el camino
la inocencia que embelesa sentidos
lo que comporta lanzas y destinos
de un umbral terso y seductor
donde explora su cosmogonía
aquella belleza de altares
en cuya proximidad llega el quehacer
de la intimidad última.
El exterminio de la realidad
sustituido por la verdadera realidad
empieza con la opción sagrada
que ilumina la creación de amor.
Mi correo es ricardocaballerodelarosa@gmail.com