Materiales didácticos, programas de televisión, micrositios con material de consulta permanente y campañas de apoyo, son algunas de las acciones que el Gobierno del Estado ha diseñado para atender a distancia a un millón 762 mil 482 alumnas y alumnos inscritos al ciclo escolar 2020-2021, informa la Secretaría de Educación a un año del cierre de las escuelas por la pandemia por COVID-19.
Una de estas acciones es la campaña “Nadie afuera, nadie atrás”, cuyo propósito es disminuir los índices de deserción escolar y lograr que las y los alumnos concluyan con éxito el ciclo escolar vigente; adicionalmente la dependencia instaló un centro de atención telefónico para comunicarse con estudiantes y padres de familia, logrando contactar a 4 mil 205 niñas y niños que estaban en riesgo de deserción.
Otras de las estrategias en la que Puebla es punta de lanza, es la creación de su propio espacio televisivo “Puebla en Casa”, donde 750 docentes de educación obligatoria han participado en la creación de 780 programas educativos; también creó el programa “De la A a la Z. Puebla en Casa”, que a la fecha suma 214 programas en vivo, que dan cuenta de logros y avances en materia educativa, transmitiéndose por el canal 26.1 de televisión abierta, en 48 municipios y ocho estaciones de radio que cubren todo el territorio poblano.
Durante estos meses, la Secretaría de Educación ha diseñado cuadernillos con aprendizajes marcados en los planes y programas de estudio, criterios para el diseño de planes de aprendizaje, lineamientos como “Evaluar para aprender”, documentos de reflexión como “Las Emociones en la Relación Pedagógica desde la Ética del Cuidado”; y creó también un micrositio con materiales de consulta permanente con los programas que se transmiten en televisión abierta de orden federal y estatal.
Finalmente, dentro de las acciones de apoyo para el proceso de educación a distancia, se realizará un foro educativo denominado “Nadie afuera, nadie atrás”, que se efectuará el 22 de marzo en línea y aglutinará a 65 mil participantes; con el propósito de buscar metodologías adecuadas basadas en la ética del cuidado de las niñas y los niños, garantizando su aprendizaje en tiempos de crisis.