Regresiones de sueño: 3 puntos clave para saber cómo tratarla.

Para Única la familia es lo más importante y para lograr un buen funcionamiento del hogar se necesita, de entre otras muchas cosas, una buena disciplina en horarios para todo: las comidas, las deberes, la hora del juego y sobre todo la hora de ir a dormir. Pero si en algún momento sufres un poco para lograr esto, se tiene la creencia que los bebés comienzan a dormir mal, por lo general entre los 3-4 meses de edad y la gente recomienda las «regresiones de sueño«. Por ello, nuestra amiga, Liliana Amaro Coach de Sueño internacional y Fundadora de Zzleep My Baby, nos explica un poco de eso:

Lo que NO es una regresión.

Las regresiones no suceden cuando el bebé que dormía bien desde recién nacido comienza a tener despertares más frecuentes a los 3-4 meses de vida, esto no es una regresión, simplemente está cambiando su patrón de sueño y los hábitos que tiene se están haciendo más fuertes cada vez, haciendo que el bebé esté más consciente de su alrededor.

Tampoco es cuando él bebe que NO dormía bien, comienza a despertarse más frecuentemente y por más tiempo.
La regresión no es cuando el niño se despierta repentinamente por la noche y se queda despierto por más de una hora.

Las regresiones reales suceden cuando:

Un pequeño que está aprendiendo a dormir, comienza a ganar buenos hábitos, buenas rutinas y de repente se niega a seguirlos.
Un bebé que dormía fácilmente con ciertos hábitos comienza a no dormir bien y ya no funcionan esas rutinas para que se quede dormido.
Un hábito se remueve y el niño quiere retomarlo.

Puntos clave:

¿Cómo se manifiesta una regresión de sueño?

Después de 3-5 noches consecutivas de sueño perfecto, el pequeño se niega a la rutina y quiere retomar hábitos anteriores.
En un niño que comienza a dormir bien y repentinamente despierta muchas veces toda la noche.
Inquietud de día y noche, pareciera imposible seguir rutinas.