Si te has enganchado con la serie mexicana de Netflix «El secreto del río», seguramente ya conoces a Solange, el personaje que acompaña al pequeño Manuel en su descubrimiento de lo que significa ser un muxe.
Detrás de este papel está La Bruja de Texcoco, una talentosa actriz trans y figura clave en la escena musical actual de México. A continuación, te contamos más sobre su vida, su arte y su impacto en la industria del entretenimiento.
La Bruja de Texcoco: una fusión de música, tradición y lucha queer
La Bruja de Texcoco es una artista imprescindible en la música contemporánea. Su formación clásica, unida a su influencia de la música tradicional mexicana y las canciones de protesta, ha dado como resultado un estilo musical único.
Con temas como “El Diablo y La Bruja”, “Suite Aquelarre” y “CHÉNI (miedo)”, La Bruja de Texcoco rescata elementos del folclore mexicano, combinándolos con una poderosa identidad queer.
Nacida en la Ciudad de México, cerca del Lago de Texcoco, La Bruja siempre supo que su pasión era la música, aunque tomó desvíos en su camino.
Antes de dedicarse por completo a la escena musical, estudió Física Matemática y más tarde enseñó música. Inspirada por la música que escuchaban sus padres y su abuelo, decidió finalmente seguir su vocación musical.
Actuación y música: el viaje de La Bruja de Texcoco
Además de su carrera musical, La Bruja ha incursionado en la actuación, logrando destacar en su papel de Solange en El secreto del río.
Su actuación ha sido aplaudida tanto por la crítica como por el público, convirtiéndola en una de las actrices trans más influyentes del México actual.
Originaria del Lago de Texcoco, La Bruja de Texcoco domina diversos instrumentos musicales, como la vihuela, el arpa y el violín. Su dedicación y talento la llevaron a perfeccionar su arte en la Escuela de Música Mexicana, donde comenzó a brillar como intérprete.
Una rebelión contra el binarismo de género
La Bruja desafía las etiquetas tradicionales de género. Se inspira en las feminidades y transfeminidades ancestrales de México, como las muxes del Istmo de Tehuantepec y las chuntaes de Chiapa de Corzo.
En su propio lenguaje, La Bruja se define con un pronombre único: «bruja» y afirma que su género es la magia.
En 2019 lanzó su disco debut De brujas, peteneras y chachalacas, y en 2024 presentó su EP Tepari, una fusión de bolero, son mexicano y música clásica acuática.
También ha dejado su huella en festivales importantes, como el Festival Vive Latino, donde en 2020 se convirtió en la primera artista trans en presentarse.
La Bruja de Texcoco en el cine: Un legado que sigue creciendo
El viaje de La Bruja fue documentado en el cortometraje “La Bruja de Texcoco” (2019), dirigido por Cecilia Villaverde y Alejandro Paredes, una pieza nominada al Premio Ariel.
Este documental de 11 minutos está disponible online, capturando la esencia y el impacto de La Bruja en la música y la sociedad mexicana.
Con su arte y su lucha, La Bruja de Texcoco sigue escribiendo una historia de resistencia y magia, uniendo música, actuación y activismo en un proyecto que desafía los límites y celebra la diversidad.
Foto de portada: Ada Navarro
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