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Puebla de mis leyendas

Pasando por este increíble recorrido descubriendo Puebla, vamos a descubrir que está lleno de leyendas y mitos que la vuelven una ciudad misteriosa y fascinante para todos los visitantes.

Nosotros como locales ya debemos de conocer un par de estas leyendas y en donde tienen lugar. Si es que no, prepárate para este recorrido por las historias más surreales de esta nuestra capital.

Los justicieros de los sapos

Hay muchas personas que aseguran y dan testimonio de este relato. Se dice que hay dos seres que deambulan por el callejón de los sapos.

Estos seres le dan lecciones a los fiesteros que pasan por la zona a altas horas de la noche en busca de fiesta, diversión y alcohol dejando en casa preocupados a familiares, pareja o cualquiera persona que los espere.

Se dice que un pequeño cachorro negro es el encargado de cautivar a las mujeres pasadas de copas. Su ternura y encanto las atrae para después convertirse en una terrible bestia con dientes afilados y una mirada que te congela la sangre, si tratas de escapar se lanzará a mordidas y arañazos.

Para los hombres se presenta como una atractiva señorita que los seduce con una increíble belleza, los varones querrán demostrar sus dotes de Don Juanes y cuando intenten besar a la supuesta mujer, se transformara en un esqueleto.

Cuentan que varios han sufrido ataques al corazón por tan terribles sustos. Pero esta es la lección para los parranderos de la zona. ¡Mucho cuidado!

Vía: Twitter

La casa del que mato al animal

Esta leyenda es todo un clásico pues se sitúa en una casona en pleno centro histórico.

La casa con el No. 201 de la avenida 3 Oriente. Era la casa del Virrey de España, Pedro Carvajal y sus dos hijos. Unos dicen que fue virrey, otros aseguran que solo fue un comerciante adinerado.

La leyenda dice que en una noche de fiesta, se apareció una enorme bestia que devoro al hijo menor. La casa fue deshabitada y Pedro ofreció una gran recompensa a quien le entregara la cabeza del animal.

El tiempo paso y una noche apareció un joven humilde montado a caballo con lo que Pedro solicitaba. Al presentarse resulto ser un antiguo amor de la hija mayor, Teodora, quien había roto la relación pues sabía que su padre jamás apoyaría un matrimonio así.

El Virrey aliviado por la captura de la bestia le ofreció al joven una gran suma en riqueza pero este la negó, diciendo que la única riqueza que le podría ofrecer seria la mano de su hija y su bendición.

Pedro admirado por el amor y la valentía del joven accedió a su petición más la casa en cuestión y una fortuna para vivir cómodamente.

Vía: Twitter

San Pedro Museo del arte

Justo en la esquina de la 4 Norte y 2 Oriente fue construida una casona allá por el año 1538.

Este inmueble fue ocupado como hospital de la milicia, la iglesia y el estado, aunque con los años después se ocupó como centro deportivo, escuela de arte, biblioteca pública, registro civil entre otras oficinas, dependiendo las necesidades gubernamentales.

Todas las personas que han trabajado ahí dan testimonios similares de que en este lugar suceden cosas paranormales. Dicen que sienten una vibra pesada, ven sombras, oyen cosas inexplicables y recorrer solo los pasillos puede incluso ser aterrador.

Cuando se le hicieron los arreglos correspondientes para convertirlo en lo que es actualmente que es el museo, en 1998, se dieron cuenta que debajo del piso del patio habían enterrados cientos esqueletos humanos. Se tiene la sospecha que cuando era hospital, las personas fallecidas que no habían sido reclamadas terminaban sepultadas de esa manera y eso explica la energía que se siente en este lugar.

Un consejo que nos dio uno de los testimonios, es que nunca le intentes ayudar a las almas si se te aparecen para pedir un favor. Pues están atrapadas en este plano intentando cumplir su objetivo en la tierra. Si aceptas ayudar quedas condenado a cumplir en cualquier tarea hasta que el alma quede liberada.

Vía: Twitter

Popocatépetl  e Iztaccíhuatl

Esta es la leyenda de un amor prohibido y un juramento eterno.

Nuestros ancestros cuentan que era una princesa hermosa de nombre Mixtli y un valiente guerrero llamado Popoca estaban profundamente enamorados. Pero el padre de la princesa ya tenía pretendiente para ella, otro guerrero de nivel superior.

Así que nuestro valiente enamorado decidió salir al combate para poder subir de rango y luchar por la mano de su amaba. Antes de partir la princesa juro esperarlo hasta el día de su regreso pero pasaron los años y no volvía. Su padre al ver que no aceptaba al pretendiente que él había escogido por estar esperando a Popoca, término por mentirle, diciéndole que el guerrero había muerto en combate.

Ante tal noticia la Mixtli no soporto el dolor de su corazón y se dejó morir de tristeza. Al poco tiempo el guerrero volvió victorioso pero fue informado de la trágica muerte de su princesa.

Entristecido con la noticia decidió escapar con el cuerpo de la princesa y construyo una tumba amontonando 10 cerros para que su amaba pudiera descansar en la cima de su pueblo.

Al recostar a Mixtli y darle un último beso, él le juro que siempre estaría de rodillas ante sus pies para protegerla y velar su descanso. Los dioses al ver este acto de amor tan grande por parte de ambos, cubrieron sus cuerpos con nieve para que con el tiempo se fueran fusionando con las montañas. Actualmente se dice que cuando el valiente guerrero suspira por su amada es cuando del volcán sale una fumarola.

Vía: Twitter

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