Como dueño de un perro, probablemente ya conozcas los numerosos beneficios que nuestros amistosos amigos nos brindan: lealtad, compañerismo, confianza en sí mismo, alguien con quien ejercitarse, y por supuesto, tener el mejor amigo del mundo.
Pero, ¿sabías que tener un perro también proporciona muchos beneficios para tus hijos también?
¡Es totalmente cierto!
En este artículo te hablaremos sobre algunos beneficios en los niños, respaldados por la ciencia, de llevar un perro al hogar.
Puede ayudar a un hijo único
¿No está en tus planes tener más de un niño? ¡Consigue un perro!
Los estudios han demostrado que cuando un hijo único recibe un perro tiende a sentirse menos solo y ve a su mascota como a un hermano. Aprende a compartir el tiempo de sus padres y de su propio espacio, a respetar a otros seres vivos y a ser amables tal como lo haría con un hermano.
Enseña responsabilidad
¿No quieres pasear al perro constantemente, peinarlo y alimentarlo?. Los perros enseñan a los niños todo sobre responsabilidad y lo difícil (y necesario) que es cuidar a otro ser vivo.
Ayudará al niño a aprender a tomar la iniciativa, permanecer enraizado y enseñarle que otro ser depende absolutamente de él.
Ayuda a desarrollar el sistema inmune
Los niños que viven con perros tienden a enfermarse menos a lo largo de sus vidas. Un estudio muestra que los bebés que son llevados a un hogar que ya tiene perro son menos susceptibles a infecciones respiratorias o resfriados.
Los perros tienen diferentes tipos de gérmenes y bacterias contra los cuales el sistema del niño aprende a construir defensas, lo que le ayuda a combatir otras enfermedades y peligros que amenazan la inmunidad a medida que crecen.
Ofrece protección
Cuando tienes un perro en casa puedes apostar a una menor posibilidad de algún robo. Los perros son excelentes para proteger de los ladrones, pues siempre están en guardia, listos para ladrar y defender a su familia. Son muy protectores, especialmente con los niños.
Los ladrones son menos propensos a atracar porque saben que un perro advertirá a su dueño, los atacará y reducirá sus probabilidades de arrebatar los bienes.
Mantiene el espíritu alto
Hoy en día, la cantidad de niños a quienes se les diagnostica depresión es impresionante. Sin embargo, los estudios demuestran que tener un perro puede disminuir las probabilidades de que tu hijo desarrolle esta terrible enfermedad.
Tener un perro reduce la tensión y reduce el estado anímico en general. Debido a que los perros siempre están felices de ver a su familia, es muy difícil para los niños no sonreír y sentirse de mejor humor tan pronto como crucen la puerta.
Mantiene activo al niño
¿Estás preocupado de que tu niño no esté más saludable? Consigue un perro. Los perros deben caminar con regularidad, y tu hijo obtendrá los mismos beneficios que su mascota: mantenerse activo.
A los niños también les encanta correr y jugar a alcanzar al perro, por lo que reciben una dosis adicional de ejercicio sin siquiera saberlo. Es una forma divertida para que sus cuerpos pierdan peso si es necesario, o asegura que mantengan un peso saludable.
Enseña amor incondicional
Un niño aprenderá a amar incondicionalmente cuando tengan a un perro. Y aprenderán esta lección más rápido que un niño que nunca haya tenido una mascota que cuidar o en la cual confiar.
Cuando los niños son capaces de reconocer este poderoso concepto, pueden aplicarlo de manera efectiva en otras personas y niños con quienes interactúan a diario, e incluso más adelante en la vida.
Enseña desinterés
Los perros enseñan desinterés. Puede que tu hijo haya sido un poco egoísta antes de tener un perro. Pero, una vez que llega un perro, rápidamente aprenden que no es todo sobre ellos.
Además de enseñar sobre responsabilidad, los perros les enseñan a los niños que ellos deben ser atendidos pues no pueden cuidarse solos.
Construye confianza
Si quieres criar a un niño seguro, dale un perro. Se ha demostrado que los dueños de perro que tienen un vínculo con su mascota tienen un vínculo más fuerte con su entorno y su comunidad, lo que les hace sentirse más cómodos donde están y con quienes son.
Por lo tanto, si notas que tu hijo necesita salir de su caparazón, un perro juguetón puede ser la manera para que se relajen.
Entonces, ¿ya estás convencido de que tu hijo necesita un perro?
Fuente: Curiosidades.