Ricardo Caballero de la Rosa
Un tiempo viajé en espacios
y en sociedades abiertas.
Sus contenidos son amplios
y sus veredas estrechas.
En sociedad de consumo
crecen dolencias y el vértigo es mayor.
La visión se ancha de tal modo
que no se ven todas las cosas.
Oímos y renacemos con sordo
eco de las maravillas.
Bellezas que al no ser nuestras
infectan del virus de no posesión.
Se cae vacíos y sin remedio
cae deseo no colmado.
Y se deja de ser hombre y mujer
y se vacía la vida.
Vaya mundo de consumo
que hunde su daga asesina.
Y daña sin matar carne
solo el pormenor de la vida.
Y dejamos de ser nuestros
y no amamos más y huimos.
He regresado al mercado
derrotado en el círculo .
Con esta consternación nada importa
nuestro poliedro mantiene vigencia.