Jorge Barrera Ríos, joven de16 años que cursa la Prepa 5 de la UNAM, no ha regresado a su casa.
El pasado 26 de octubre, luego de una broma que realizaron las y los compañeros de Jorge Barrera Ríos, éste desapareció, hasta el momento se desconoce su paradero.
A Jorge se le vio por última vez en la calle Abejones, colonia Ampliación Isidro Fabela, alcaldía Tlalpan.
Vestía chamarra negra con franja gris, pantalón de mezclilla gris y tenis blanco con negro; como señas particulares tiene un lunar en el dedo índice y pulgar, y una cicatriz en el costado izquierdo.
Sus últimos mensajes
A través de redes sociales también comenzaron a circular supuestos audios enviados por Jorge Barrera antes de su desaparición.
«Tengo que trabajar el doble para recuperar el dinero que me gasté para ir a la preparatoria, para mover cielo mar y tierra, por favor cuando uno les diga, fuera de coto, ya dejando de bromear, por favor… pero por favor, cuando se les dice ya, es ya, no todo en la vida es risa y risa, ja ja ja», les dice Jorge.
Continúa:
«Muchos de ustedes, tienen internet en su casa, su internet en su casa, entonces no tienen que preocuparse casi por nada, sus papás trabajan, algunos son profesionistas, algunos tienen más ventajas que otros, tienen alguna mejor posibilidad y con eso mucho menos barreras, muchos menos obstáculos que tener en el estudio, habemos muchos más que no tenemos esa posibilidad, no tenemos la posibilidad de estar todo el día en internet, mucho menos de tener internet fijo en la casa».
«Para muchos será una bromita, ‘ay no pasa nada, ay pues ya’…uno tampoco está mucho a la disposición de las personas, habemos unos que vivimos bastante lejos, otros que tenemos que salir a comprar cosas, a hacer cosas para después regresar a la ciudad para después revender esas cosas, hay muchas personas que se quedan en su casa sentaditos, comen, se paran, hacen la tarea y se estresan todo el día», prosigue en un audio de más de cinco minutos.
«Yo tengo que salir, tengo que regresar, no estoy todo el día en mi casa…me pusieron el pie bastante feo, también es mi culpa por ser tan, hasta cierto punto, ignorante, creído, inocente hasta cierto punto porque nunca en verdad… nadie, me había hecho esto, nadie. Es triste pensar de los que yo me fie, confié en que fueran mis compañeros, a un tiempo futuro mejores amigos, me hicieran esto porque duele, duele bastante que te hagan esto, que te traicionen», les dice.
Con información de Proceso