A través de un estudio, investigadores de la Universidad Pablo de Olavide (UPO) en Sevilla, España revelaron que el ejercicio regular mejora la salud física y mental de la población general y específica, como los pacientes psiquiátricos en prisión.
Al tomar en cuenta que uno de cada siete internos tiene al menos un trastorno mental y este repercute de manera negativa sobre su salud y comportamiento, disparando el gasto sanitario, los especialistas resaltaron la importancia de su enfoque en esta población.
El especialista Diego Munguía Izquierdo, miembro del grupo Actividad física, salud y deporte, de la UPO, explicó que con la evidencia recabada no prescribir ejercicio físico a pacientes físicamente debilitados debería considerarse una negligencia.
Diseñado y supervisado por los especialistas Bueno Antequera y Oviedo Caro, los resultados del estudio se publicaron en la revista académica “Clinical Rehabilitation”.
La investigación podría aumentar la conciencia de los profesionales de la salud sobre la importancia de la actividad física como medicina en las penitenciarías y alentar a la comunidad científica para abundar en las investigaciones sobre este tema.
La aplicación práctica para la viabilidad de los futuros programas de ejercicio orientado a la salud es que los pacientes sean canalizados a centros deportivos o unidades incorporadas en las instituciones sanitarias, puntualizó Oviedo Caro.
Fuente: Selecciones Reader’s Digest