La cantante, bailarina y conductora mexicana Melissa Galindo reveló hace un año el abuso sexual que sufrió con Kalimba tres años atrás, en 2021, durante una fiesta.
En ese momento, Melissa Galindo vivió situaciones que la dejaron paralizada, pero posteriormente buscó asesoramiento legal y expuso su caso para señalar a Kalimba.
Un año después de este evento, el intérprete de «Tocando fondo» enfrentó un proceso por presunto abuso sexual agravado con violencia después de una audiencia de más de seis horas en el Reclusorio Oriente de la Ciudad de México.
A pesar de las acusaciones, el artista de 41 años y padre de dos hijos permanecerá en libertad durante el proceso, ya que la parte acusadora no pidió la prisión preventiva. El juez otorgó un plazo de seis meses para ampliar las investigaciones.
Al salir de la audiencia, Kalimba expresó su confianza en demostrar su inocencia:
«Estoy muy tranquilo, sigo confiando en las autoridades, sigo confiando en la ley. Mi inocencia se probará con el proceso que sigue, ahí estoy y no hay más que decir«, afirmó.
Los eventos tuvieron lugar después de que Melissa Galindo abriera un concierto de Kalimba en Monterrey en 2021. Tras la actuación, mientras el grupo celebraba, Kalimba, quien había bebido mucho, se sentó junto a Melissa en la camioneta. Primero, tocó su rodilla y comenzó a elogiar su música.
«De pronto sentí algo que tocó mi vagina, su mano la recorrió hacia arriba y fue como que la neta entré en shock, me cerré (las piernas) y puse la manos, pero no dije nada, porque dije capaz fue sin querer, para qué hago un lío, ahorita ni al caso. Estoy con su gente, con su equipo, aquí desprotegida, ni al caso hacer un lío«, relató Melissa.
Después de este incidente, durante la cuarentena por Covid-19, Melissa recibió llamadas de Kalimba y su mánager para salir, pero ella se negó. Sin embargo, por la tarde, ambos se presentaron en su hogar.
Esa vez, para evitar que se quedaran, salió con ellos. En la camioneta, Kalimba volvió a tocarla y en su casa intentó tener relaciones sexuales con ella.
«Nadie se va a enterar, me dijo».
Al día siguiente, Melissa contactó a un abogado para terminar su contrato con la disquera de Kalimba, argumentando incumplimiento del mismo.
En respuesta, la disquera mencionó presuntos adeudos de Melissa, a lo que ella respondió que los recibos estaban inflados.
Melissa ha enfatizado que habló para que las mujeres que pasen por situaciones similares no permanezcan en silencio.
«Honestamente esto lo hice para que no siga pasando y para que cada día tengan más miedo de tocar a una mujer que no ha dado pie a que toquen su cuerpo«, subrayó.
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amb
