Tras enfrentarse a unos 200 participantes, egresados de la Facultad de Medicina de la BUAP obtuvieron el primer lugar en la categoría de Investigación de Tesis en “Ciencia que Palpita”, una jornada de divulgación científica donde presentaron un trabajo que analiza los hábitos alimenticios, de actividad física y factores hereditarios en estudiantes de Medicina de esta Universidad, para conocer los factores de riesgo de padecer una enfermedad cardiovascular.
“En este evento se presentó la oportunidad de participar en tres rubros: revisión de artículos, casos clínicos y presentación de tesis. Nuestra intención era dejar un estudio que aportara algo a la facultad que nos formó, porque la información y los resultados que obtuvimos pueden servir para contribuir con medidas de prevención que reviertan tendencias negativas para la salud de los alumnos”, señaló María del Carmen Martínez Martínez.
Por su parte, Juan Manuel Hernández aseguró que este trabajo también refleja el impacto que tienen las enfermedades cardiovasculares (ECV) en la población. De acuerdo con información oficial, padecimientos como hipertensión arterial sistémica, cardiopatía isquémica, infarto al miocardio y cardiopatías congénitas son la primera causa de muerte a nivel nacional, mientras que en Puebla ocupan el segundo lugar.
Asesorados por el doctor Guillermo Muñoz Zurita, académico de la Facultad de Medicina de la BUAP, su investigación se enfocó en estudiantes de la Licenciatura en Medicina, de las generaciones de 2014 a 2019. “Del total de la población hicimos un cálculo muestral aproximado con un intervalo de confianza del 95% y un margen de error del 5%, fue así como entrevistamos a 370 alumnos”, detalló María del Carmen Martínez.
La metodología de la investigación.
A partir de su estudio descriptivo, los egresados se apoyaron en el instrumento STEP que está avalado por la OMS y sirve para valorar factores protectores y de riesgo, estos últimos divididos en modificables (hábitos, estilo de vida) y no modificables (antecedentes hereditarios).
Una vez que se realizaron las encuestas y se analizaron los datos, los resultados revelaron que 67 por ciento del total de los encuestados se encontraba en un peso normal, mientras que más del 25 por ciento presentaba sobrepeso o alguna categoría de obesidad. Además, 52 por ciento tenían un antecedente hereditario de cardiopatía isquémica y un 40 por ciento antecedentes de hipertensión arterial.
“La mitad de nuestra vida la pasamos haciéndonos daño y la otra mitad cuidándonos, creyendo que vamos a remediar lo que ya hicimos en años anteriores, y realmente lo único que pasa es que disminuimos riesgos, porque una vez que generan placas ateroscleróticas es casi imposible eliminarlas, por eso este estudio fue en una población joven, porque en realidad es cuando hay que prevenir”, finalizó Carmen Martínez.