En las últimas semanas, los rumores de un inminente divorcio entre Kim Kardashian y Kanye West son cada vez más más fuertes.
En el caso de concretarse la separación, una de las parejas más poderosas de Hollywood tendrá que resolver cómo repartirán los millones que hicieron durante su tiempo juntos. Pero a la mediática estadounidense lo que más le preocupa en estos momentos son sus cuatro hijos.
Kim está pensando en el bienestar de los niños mientras se avecina una posible separación de West. La famosa pareja tiene a North, de 7 años, Chicago, que apenas cumplió 3, Saint, de 5, y Psalm, de 2.
En medio de las noticias de que Kardashian se está preparando para solicitar el divorcio de su marido después de casi siete años de matrimonio, una fuente le dijo a People que está preocupada por lo que eso significará para los niños. “Son muy importantes para ella y le preocupa cómo será una separación definitiva para ellos».
Al parecer, Kardashian ha estado luchando en su decisión de si poner fin o no a su matrimonio con West tras un año tumultuoso que incluyó la controvertida carrera presidencial de su marido y su lucha pública contra el trastorno bipolar.
Sobre el dinero…
La pareja firmó un contrato prenupcial en marzo de 2014, dos meses antes de su millonaria boda en en Florencia, Italia. Hoy el acuerdo parece obsoleto. En ese año, el músico tenía una fortuna estimada de USD 100 millones, contra USD 40 millones de su esposa.
Kardashian ahora posee 780 millones, frente a los 1.300 millones de West. A cargo de la disolución de su matrimonio estaría la famosa y temida abogada Laura Wasser, que ha representado a famosos como Angelina Jolie, Britney Spears y Johnny Depp.