La violencia y el acoso escolar, incluido el ciberacoso, son frecuentes y afectan a numerosos niños y adolescentes.
Los Estados Miembros de la UNESCO designaron el primer jueves de noviembre de cada año como Día Internacional contra la Violencia y el Acoso en la Escuela, incluido el Ciberacoso, reconociendo de este modo que la violencia en el entorno escolar bajo todas sus formas atenta contra los derechos de los niños y los adolescentes, la salud y el bienestar.
La UNESCO hace un llamamiento a asociados de las Naciones Unidas, otras organizaciones internacionales y regionales interesadas, así como a la sociedad civil, incluidas las organizaciones no gubernamentales, las personas y otras partes interesadas a prestar ayuda en la promoción, organización y celebración de este día internacional.
Conmemoración en 2024
Este 7 de noviembre de 2024 la UNESCO pone a los estudiantes, niños y niñas en primer plano. Bajo el tema Proteger, educar, empoderar: Los y las estudiantes exigen escuelas seguras e inclusivas, la conmemoración de 2024 destaca el papel esencial de la educación para poner fin a la violencia y la importancia de la perspectiva de los y las estudiantes en la elaboración de políticas y prácticas educativas.
El tema de este año se basa en los compromisos globales y recuerda la urgencia de combatir la violencia en y a través de la educación, así como de invertir en alianzas intersectoriales. Al amplificar las perspectivas de los y las estudiantes y la voz de los niños y de las niñas,se hace un llamado a los líderes para que cumplan con sus compromisos y promesas de transformar los entornos de aprendizaje en espacios seguros e inclusivos, donde los niños y las niñas puedan aprender y desarrollarse plenamente.
Este año, la conmemoración coincide con la apertura de la primera Conferencia Ministerial Mundial sobre la Eliminación de la Violencia contra los Niños, que se llevará a cabo en Bogotá, Colombia, los días 7 y 8 de noviembre. A través de una serie de eventos organizados durante la conferencia, la UNESCO y sus socios destacan el poder de la educación para poner fin a la violencia y presentan buenas prácticas para abordar las causas profundas de la violencia y conectar a los niños con los servicios de apoyo que necesitan para desarrollarse plenamente.

Aunque los datos disponibles a escala mundial sean limitados, es evidente que el ciberacoso ha aumentado en varias regiones del mundo durante la pandemia. En Europa, el 44% de los niños que ya habían sido víctimas de ciberacoso indicaron que el fenómeno se incrementó durante el confinamiento.
Los datos provenientes de varios países revelan también que los niños, en particular, las niñas entre 11 y 13 años, son los más expuestos a convertirse en blanco de depredadores sexuales. En Estados Unidos, el 98% de los depredadores sexuales en línea no han visto nunca a sus víctimas en la vida real.
Aunque la violencia en línea no ocurre solo en los centros educativos, el sistema educativo tiene una misión importante que cumplir al abordar las cuestiones de seguridad en Internet, de ciudadanía digital y de utilización de tecnologías.
La educación formal puede y debe desempeñar un papel clave al brindar a los niños, niñas y jóvenes las capacidades y conocimientos necesarios para identificar la violencia en línea y protegerse contra las diferentes formas en que puede presentarse, ya sea por parte de sus compañeros o de los adultos.
La violencia en línea, incluido el ciberacoso, afecta los rendimientos escolares, la salud mental y la calidad de vida de los alumnos. Los niños y niñas que suelen ser víctimas de acoso tienen tres veces más probabilidades de sentirse excluidos en la escuela que aquellos que no. Además, corren el doble de riesgo de faltar a clases, y tienden más a abandonar el sistema de educación formal antes de terminar sus estudios secundarios.
Este Día tiene como objetivo sensibilizar a las personas a escala mundial acerca del problema de la violencia en línea y el ciberacoso, sus consecuencias y la necesidad de ponerles fin. También hace un llamado a los alumnos, los padres, los demás miembros de la comunidad educativa, las autoridades encargadas de la educación y los diversos sectores y asociados, incluido el sector de las tecnologías, a ponerle atención a este problema para incitarlos a contribuir a la prevención de la violencia en línea, con miras a garantizar la seguridad y el bienestar de niños, niñas y jóvenes.
«Aunque esta violencia no se limita a los establecimientos escolares, el sistema educativo tiene una importante función que desempeñar a la hora de enseñar a los alumnos a navegar con seguridad en la esfera digital. La educación formal debería proporcionar a los niños y los jóvenes determinados conocimientos y competencias, a saber: cómo comportarse con civismo en línea, desarrollar mecanismos de afrontamiento, detectar y denunciar la violencia en línea y, lo que es más importante, protegerse a sí mismos y a otros de las diferentes formas de ciberacoso, ya sea perpetrado por compañeros o por adultos.»
Audrey Azoulay, Directora General de la UNESCO, con motivo del Día Internacional contra la Violencia y el Acoso en la Escuela, incluido el Ciberacoso.