El arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez Espinosa, cuestionó las actitudes de discriminación que se presentan contra las personas enfermas de covid-19 y de otros padecimientos, y contra el personal médico que se encuentra en la primera línea de lucha contra la pandemia; llamó a seguir las medidas sanitarias para romper con la cadena de contagios; y resaltó la importancia de defender la vida desde la concepción y hasta la muerte natural.
Al encabezar la misa dominical en la Basílica Catedral de Puebla que se mantuvo sin la presencia de fieles católicos como lo establece el decreto del gobierno del estado para contrarrestar los casos de covid-19, Sánchez Espinosa lamentó que la pandemia haya puesto de manifiesto el rechazo social que existe contra los enfermos y contra los médicos, quienes llegan a sufrir la humillación.
“Esta situación podría verse como producto de una cultura discriminatoria, intolerante y violatoria de los derechos humanos; sin embargo, es una oportunidad para mirar nuestra propia realidad. Si somos honestos, nuestra sociedad no está alejada de actitudes insensibles. La pandemia que estamos viviendo, entre otras muchas otras lamentables situaciones, ha puesto de manifiesto expresiones de rechazo social hacia nuestros hermanos enfermitos, incluso hacia el personal de salud. La ignorancia y la barbarie de algunos, se ha llegado a manifestar en aberrantes datos de humillación”, destacó.
Señaló que, en el pasado, las personas con lepra fueron rechazadas, como hoy sucede con otras enfermedades, entre ellas, el covid-19; sin embargo, es momento de contrarrestar el pecado de la exclusión.
“Cuán difícil era vivir en la comunidad cuando se vivía la lepra. Hoy, también se excluye por muchas situaciones. Es un fuerte pecado social que Jesús no acepta. El leproso tenía que vivir fuera del campamento y es lo que Jesús no acepta, ese pegado social para para estos hermanos enfermos”, destacó.
A través de las redes sociales de la arquidiócesis de Puebla por las que se transmitió la misa dominical, Sánchez Espinosa resaltó la importancia de la defensa de los derechos humanos y explicó que el principal es el de la vida, sin el cual, no se puede hablar de los demás.
“Es fundamental la esparza y la inclusión a los marginados (…). Ahora se habla mucho de los derechos humanos, el derecho a la vida, el derecho a la salud, el derecho a la educación, el derecho al trabajo. Si no cumplimos con el derecho humano tan fundamental de la vida, pues, no podemos hablar de los demás derechos”, destacó.
El próximo 17 de febrero, miércoles de ceniza, inicia la cuarema, un periodo de reflexión para comenzar un cambio interior y ser mejores cada día personas, expresó el líder de la grey católica en Puebla.
“Estamos por iniciar el camino penitencial, cuaresmal, para llegar a los días santos de la Pascua. El próximo miércoles iniciamos nuestro camino cuaresmal. Es dichoso aquel que ha sido absuelto de su pecado y su culpa (…). Iniciamos el próximo miércoles, nuestro camino penitencial, nuestro camino cuaresmal. Es un tiempo de reconciliación con Dios y nuestros hermanos. Es un tempo de más vida de oración, de más visa sacramental, de más obras buenas”, destacó.
La ceniza es un signo de que se reconocen las limitaciones. “Nosotros somos humanos, pecadores y de que vamos peregrinando hasta que Dios quiera. Reconocemos que somos polvo y en polvo nos vamos a convertir”, resaltó.