Dos mujeres perdieron la vida de forma violenta luego de ser atropelladas en calles del Centro Histórico de Puebla por un microbús del transporte público de la ruta 76, cuyo conductor dejó abandonada la unidad y se dio a la fuga.
De acuerdo con reportes policiales, los hechos ocurrieron la tarde de este martes cuando dos mujeres caminaban sobre la calle 16 de septiembre y al llegar a la esquina de la 11 Poniente se dispusieron a cruzar.
Aparentemente el conductor del transporte público de la unidad 31, de la ruta 76, no habría tenido precaución y aceleró antes de tiempo, atropellando a las dos mujeres y proyectándolas contra el piso con severas lesiones en todo el cuerpo.
El conductor no detuvo la marcha y dejó abandonada la unidad sobre la misma 11 Poniente, pero hasta la altura de la 5 Sur, llevándose solamente el dinero de la cuenta y los documentos del microbús.
Por su parte, paramédicos del Servicio de Urgencias Médicas Avanzadas (SUMA), así como del grupo Relámpagos de Protección Civil Municipal, acudieron al lugar y en una primera instancia confirmaron el deceso de una de las mujeres, de aproximadamente 71 años de edad y quien fue identificada como Ofelia, a causa de un traumatismo craneoencefálico severo con exposición de masa encefálica.
En tanto que una segunda mujer, de aproximadamente 41 años de edad, de nombre Adriana, recibió atención prehospitalaria por parte de paramédicos de SUMA en la ambulancia 194, ya que presentaba una fractura expuesta de fémur y tenía la cadera rota, sin embargo, los técnicos en urgencias médicas no lograron estabilizarla y terminó por fallecer.
Fue así como se procedió a acordonar toda la zona hasta concluir con las diligencias de levantamiento de cadáver y autorizar el traslado de los cuerpos al servicio médico forense, en donde se espera que se puede hacer la identificación oficial y los cuerpos sean entregados a sus familiares.
En tanto que la unidad del transporte público quedó a disposición del área de Tránsito Municipal de la Secretaría de Seguridad Pública a la espera de que el legítimo propietario acuda a reclamarla y se puedan así obtener datos sobre la persona que la conducía.
