Si te gustan los sabores picositos, tienes que preparar unos boneless de pollo con una tradicional salsa buffalo.
La salsa buffalo es una de las favoritas para preparar boneless de pollo, al igual que con las alitas, esta salsa, también se conoce como la salsa original con la que se empezaron a preparar estos deliciosos snacks de pollo. Esta salsa obtuvo su nombre a partir de la ciudad en la que se originó Buffalo, Nueva York, básicamente se trata de una salsa picante hecha a base de pimienta de cayena y mantequilla fundida, aunque con el tiempo se ha ido modificando la receta y creando diferentes versiones, lo que caracteriza a todas es el color entre rojo y anaranjado y por supuesto el sabor picante.
INGREDIENTES:
750 gramos de pechuga de pollo sin hueso.
1 taza de harina.
Aceite.
2 huevos.
Sal y pimienta.
90 gramos de mantequilla.
2/3 de taza de salsa picante.
1 cucharada de vinagre.
1/2 cucharadita de sal.
1/2 cucharadita de salsa inglesa.
1/2 cucharadita de pimienta cayetana.
1/4 cucharadita de ajo en polvo.
1 cucharada de azúcar mascabada.
INSTRUCCIONES:
Corta las pechugas en cubos pequeños y sazona con sal y pimienta.
Mezcla la harina con el ajo en polvo y en un recipiente a parte bate los dos huevos.
Caliente la sartén con un poco de aceite.
Pasa los trozos de pechuga por el huevo y posteriormente por la harina. Fríe bien por ambos lados en el aceite.
Para la salsa derrite la mantequilla en una sartén, agrega poco a poco el resto de los ingredientes.
Deja que comience a hervir y cocina por 5 minutos más a fuego medio.
Baña los boneless con la salsa y sirve.
Tips para prepararar boneless.
Salpimienta bien el pollo antes de freír.
Fríe en abundante aceite en una olla limpia y escúrrelos en un colador. Quedarán crujientes por fuera y jugosas por dentro.
Además de freirlos también puedes hornearlos con un poco de aceite.
Colócalos en un tazón y ahí báñalos con la salsa, mezcla bien para que queden mejor impregnados.
Acompañalos con apio y algún aderezo ranch o blue cheese para darles un mejor sabor.
Puedes preparar tus propias salsas o buscar las que ya están preparadas como la búfalo.
Sírvelos en tazones separados por sabor o en charolas con secciones.
Si no te gusta el apio, te recomendamos servirlos con zanahorias baby.
Con información de Cocina Fácil