Los científicos integrantes del Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático (IPCC) de las Naciones Unidas. afirman que tenemos sólo 12 años para salvar el planeta de un cambio climático catastrófico.
Desafortunadamente el estilo de vida moderno ha contribuido a que se duplique el uso de energía y aunque existan fuentes de energía limpias aún se usa más aquellas que conlleva quema de combustibles fósiles como carbón, petróleo o gas lo que ocasiona que se generan grandes cantidades de Gases de Efecto Invernadero.
Sabemos que tener gases de efecto invernadero se produce de manera natural y además son determinantes para la supervivencia de los seres vivos; ya que estos gases impiden que parte del calor del sol se propague hacia el espacio, hacen la Tierra habitable.
Gracias a la industrialización, tala de árboles, así como la utilización de métodos de cultivo han provocado el aumento de gases de efecto de invernadero; es decir la temperatura de la tierra no había cambiado mucho en 10.000 de años, sin embargo se ha incrementado significativamente en los últimos 150 años. Si esta tendencia se mantiene muchas especies estarán en peligro de extinción incluido el ser humano ya que no podría ser capaz de adaptarse lo suficientemente rápido.
Consecuencias del cambio climático
- Los glaciares se han reducido, el hielo en los ríos y lagos se está derritiendo antes de tiempo, los hábitats de plantas y animales han cambiado y los árboles florecen antes.
- Las temperaturas continuarán aumentando.
- Los huracanes serán más fuertes y más intensos.
- Más sequías y olas de calor.
- Cambios en los patrones de precipitación.
¿Qué podemos hacer?
Reduce emisiones: usa menos el carro, prefiere la bicicleta o el transporte público, toma en cuenta que por cada kilómetro que aumentas la velocidad aumenta considerablemente el CO2 y el gasto. Cada litro de combustible que consume el coche supone unos 2.5 kilos de CO2 emitidos a la atmósfera.
Ahorra energía: evita dejar la computadora en stand by, evita dejar conectado tu cargador de celular; al final seguirá consumiendo electricidad; recuerda ajustar el termostato de tu aire acondicionado.
Vigila los electrodomésticos: tapa los recipientes cuando estén en la estufa; prefiere el uso de vaporeras u ollas a presión; procura usar la lavadora o lavavajilla cuando estén llenos en caso que no sea así opta por programas más económicos. Toma en cuenta que el refrigerador no debe estar cerca de
Recuerda que si el frigorífico y el congelador están cerca de los fuegos o de la caldera, consumirán mucha más energía. Si son viejos, descongélalos periódicamente. Los nuevos tienen ciclos automáticos de descongelación y son casi dos veces más eficientes. No pongas en la nevera alimentos calientes o templados: ahorrarás energía si dejas que se enfríen primero.
Pon en práctica las 3 ‘R’ de la sostenibilidad: reduce: consume menos, de manera más eficiente, reutiliza: aprovecha los mercados de segunda mano, para dar otra oportunidad a aquellas cosas que ya no usas; recicla: envases, residuos electrónicos, etc. ¿Sabias que puedes ahorrar más de 730 kilos de CO2 al año solo con reciclar la mitad de la basura que se genera en el hogar?
