El Barcelona llega segundo al parón de selecciones a sólo dos puntos del líder Real Madrid. Octava jornada y ya tenemos a uno y otro en los puestos más altos de la tabla. Y con el Clásico a la vuelta de la esquina. Los de Valverde no están finos, no han jugado de forma brillante salvo minutos contados ante Betis, Valencia y Sevilla, pero siguen siendo los más regulares y así es como se ganan ligas.
El entrenador culé sigue haciendo cambios, no da con un once tipo, tiene que mandar al banquillo a titularísimos los últimos años como Busquets o a fichajes a golpe de talonario como Griezmann y eso es muy significativo a la hora de señalar que los tiempos están cambiando en Can Barça. Pese a todo, tercera victoria seguida en Liga -cuarta si sumamos la del Inter- y el equipo llega al parón a un paso del liderato.
Dembélé y Arturo Vidal, los revulsivos ante el Inter de Milán en Champions, se ganaron la titularidad ante el Sevilla y respondieron con creces. Jordi Alba está de vuelta aunque fuera suplente, Messi parece tener olvidada su lesión, Luis Suárez recupera su idilio con el gol, Ter Stegen lo para todo y poco a poco el conjunto de Valverde va recuperando la normalidad para recibir al Real Madrid el 26 de octubre en plenitud de condiciones y con el asalto al liderato entre ceja y ceja previo paso por Eibar.
Pero la victoria ante los de Julen Lopetegui no fue nada fácil. El cuadro sevillista salió mejor de inicio y tuvo el 0-1 hasta en tres ocasiones. Y las tres con el mismo protagonista: De Jong, el delantero holandés que le ganó la partida, al menos en este partido, a Javier ‘Chicharito’ Hernández.
Primero, un remate a bocajarro tras jugadón de Ocampos que salvó Ter Stegen. Después, con otro remate a la salida de un córner que rozó el gol y para cerrar el hat-trick de errores un cabezazo desde cerca que botó en el césped y se fue por encima de la meta azulgrana.
Y de un clásico de esta Liga como son las paradas salvadoras de Ter Stegen a otro clásico del mundo del fútbol: si perdonas lo pagas. El Barcelona no falló en la primera que tuvo. Ni en la segunda ni en la tercera… Un centro medido de Semedo por banda izquierda lo remató Luis Suárez de chilena para hacer el 1-0. Minuto 27. Arturo Vidal remató de primeras un centro de Arthur y 2-0. Minuto 32. Dembélé recibe un balón en el área, recorta por dos veces y cruza ante Vaclik para el 3-0. Minuto 35. Partido resuelto en 8 minutos.
La segunda parte comenzó con el cuarto capítulo del serial de fallas de De Jong. Robó un balón a Arthur al borde del área y su disparo se estrelló en el poste. Messi, que está de vuelta, pero necesita la vitamina del gol, tuvo el 4-0 en una jugada de las suyas dejando atrás rivales y rematando de forma cruzada, sin embargo, se le veía con ganas a Messi y en el minuto 77 volvió a saborear lo que se siente al marcar un gol. Una falta en su distancia, lanzamiento preciso y Vaclik rozó el balón pero no lo suficiente. 4-0 a todas luces exagerado para el Sevilla.
Después vino la función de Chicharito. Entró al minuto 65 por el mentado De Jong, pero su actuación más destacada llegó cuando propició la expulsión del debutante Araujo,la de Dembélé por protestas y una amarilla para Busquets. Lo mejor del mexicano en lo que estuvo dentro del terreno de juego.
El final del partido reflejó la impotencia ofensiva del Sevilla y la confirmación de un Barcelona que se parece cada vez más a lo que se espera de él. Y lo más importante con Messi a tope.