Este 11 de diciembre Puebla celebra su 37 aniversario como Ciudad Patrimonio Cultural de la Humanidad, debido a que el Centro Histórico, forma parte de la primera camada de los bienes inscritos por México en la lista de Patrimonio Mundial junto con la Ciudad de México.
El nombramiento por parte de la UNESCO como Patrimonio Cultural de la Humanidad para Puebla se dio en 1987, distinción que comparte con ciudades como Atenas y Quito, siendo el sexto sitio que obtuvo este título en América Latina.
La importancia del legado arquitectónico se conserva en un perímetro de casi 7 kilómetros cuadrados, con 2 mil 619 inmuebles registrados en 391 manzanas.
Puebla y las Ciudades Patrimonio Cultural de la Humanidad: Tesoros de México
México es un país rico en cultura, historia y tradiciones. Entre sus joyas más destacadas se encuentran las ciudades declaradas Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO, que reflejan la diversidad y el esplendor de su legado. Entre ellas, Puebla ocupa un lugar especial gracias a su arquitectura, su gastronomía y su importancia histórica.
Puebla, su valor excepcional
Puebla es una de las mejores muestras de la urbanística hispánica en el Nuevo Mundo entre los siglos XVI y XIX y de su enorme belleza arquitectónica. Se trata sin duda de uno de los centros históricos más ricos y exquisitos del continente americano.
En este contexto, representantes de la UNESCO han destacado que cuando el corazón de la ciudad fue declarado Patrimonio Mundial, el comité del mismo nombre reconoció el excepcional estado de conservación de sus edificios religiosos, tales como la catedral.
Resalta la arquitectura del palacio del arzobispado y diversas casonas decoradas con mosaicos de talavera y la excepcionalidad de su traza urbana renacentista, que formaron parte de los motivos por los que Puebla obtuvo el nombramiento.
Además, su belleza es doble. Por una parte, está su armonía como conjunto urbano, la cual deriva de su magnificencia general, su traza reticular de estilo renacentista y el uso reiterado de ciertos elementos arquitectónicos típicos como el petatillo y el azulejo.
Esta ciudad destaca igualmente por el enorme número de prodigios arquitectónicos individuales en su mayoría virreinales y de estilo barroco.
Elementos icónicos
Quizá sean tres excepcionales monumentos de aires barrocos los que mejor representan el arte poblano: la majestuosa Catedral, una de las más bellas de América, la Biblioteca Palafoxiana y la deslumbrante Capilla del Rosario en el interior del Templo de Santo Domingo.
Gastronomía poblana, patrimonio intangible,
La gastronomía de Puebla es un reflejo de la fusión cultural que caracteriza a la ciudad. Platos como el mole poblano, los chiles en nogada y las chalupas son reconocidos a nivel internacional. Estos manjares no solo deleitan el paladar, sino que también cuentan historias de tradiciones y celebraciones que han pasado de generación en generación.
De igual forma, dio a conocer que hace poco se sumó un nuevo reconocimiento documental en el programa memorias del mundo de la UNESCO por los impresos poblanos del imperio mexicano 1822.
A esto se suma a un enorme abanico de reconocimientos que ha recibido Puebla por parte de la organización, además de ser parte de la red de ciudades creativas, del aprendizaje y tener múltiples inscripciones en el programa de memoria del mundo.
Además, la capital poblana también se ha destacado porque es ejemplo para otras ciudades, pues hace poco tiempo se puso en marcha el plan de manejo que integra los objetivos de desarrollo sostenible de la agenda 2030.
La importancia de proteger el patrimonio
El reconocimiento como Patrimonio Cultural de la Humanidad no solo celebra la belleza y singularidad de estas ciudades, sino que también implica un compromiso con su preservación. Estas designaciones atraen turismo y recursos, pero también conllevan la responsabilidad de conservar la integridad y autenticidad de estos espacios.