El 12 de noviembre se celebra el día del cartero y empleado postal, es un reconocimiento a las mujeres y hombres que día a día recorren una gran cantidad de kilómetros, ya sea en vehículo, bicicleta o a pie, para entregar correspondencia en millones de hogares mexicanos.
Aunque en la actualidad, el cartero ya no entrega mensajes de amor, sino que lleva a los mexicanos aquellas cartas que estresan, la mayoría provenientes del banco, es importante destacar aquella labor que desempeñan, pues siempre lo hacen en tiempo y forma.
En nuestro país el oficio de cartero, antes conocido como corredor, existe desde antes de la llegada de los españoles. Eran personas con una grandiosa condición física, pues eran capaces de recorrer largas distancias, para entregar la correspondencia que en su mayoría eran mensajes y noticias. En ese entonces lo que ahora llamamos correo, era la Posta.
El imperio azteca, creo un sistema de relevos de cada 10 kilómetros, con lo que se garantizaba calidad y que la entrega fuera en el menor tiempo posible. Desde entonces, se comenzaron a transportar todo tipo de mercancías como joyas, paquetes, alimentos, telas, entre otros. Para la época colonial, el sistema fue aún más rápido con la inclusión del caballo, apoyando la labor del mensajero.
En año de 1759, se instauró el correo en la península de Yucatán, para después fundar las oficinas postales de Veracruz, Oaxaca, Guanajuato y Puebla, ya con estas oficinas operando, se crearía el servicio de estafetas o correo especial y el diplomático, así comenzó a crearse una red de servicios de correos moderna y eficiente.
Durante el imperio de Maximiliano se inauguraron los primero buzones y sobres postales, que permitió un mayor control en el servicio de paquetería y correspondencia. En el porfiriato y su crecimiento en las vías férreas, el sistema de correspondencia se volvió más eficiente, rápido y extenso, lo que permitió la construcción del palacio postal en la ciudad de México, mismo que sigue en función actualmente.
El origen de esta celebración, se debe a las proezas de dos carteros para lograr que la correspondencia llegara al lugar indicado, este suceso ocurrió en el año de 1922 cuando un tren de mercancías que transportaba 50 millones de pesos en oro y una abundante correspondencia militar tuvo un terrible accidente con numerosas muertes. En el tren viajaban dos carteros que recogieron todas aquellas cartas y el oro que pudieron rescatar para entregarlo a quienes correspondiera.
El coronel Luis G. Franco admirado por tan noble gesto, quiso dedicar un día de agradecimiento y fue así que el presidente Pascual Ortiz Rubio también reconoció el acto por lo que se instauró el día del cartero y del empleado postal el 12 de noviembre de 1931, siendo esa su primera celebración.
Ser cartero ha sido y sigue siendo muy importante, gracias a su trabajo permite que las personas puedan comunicarse y enviarse una gran variedad de mercancías que llega al receptor en pocos días e incluso en unas horas, hoy en día las motocicletas son el principal transporte usado para realizar su trabajo, que muchas veces son esperados por perros para perseguirlos hasta la esquina de la calle. Hoy las personas envían menos cartas y con el uso de la tecnología permite el envío de información en medios digitales.
Lo cierto es que los 7,805 carteros registrados según información de SEPOMEX son fundamentales para que la sociedad se siga comunicando y recibiendo gran variedad de mercancías.
Ricardo Rugerio