La XXIX Procesión de Viernes Santo que está programada para el próximo 10 de abril las 11:30 horas y que partirá del atrio de la Catedral de Puebla.
La XXIX Procesión de Viernes Santo que está programada para el próximo 10 de abril las 11:30 horas y que partirá del atrio de la catedral de Puebla, recorriendo calles del Centro Histórico, contará con la participación de más de 160 mil fieles; sin embargo, el acto religioso se podría cancelar si la Secretaría de Salud recomienda cancelar concentraciones de personas ante los casos de coronavirus en el país.
Carlos Manuel Martínez Cruz, presidente del Comité Organizador de la Procesión de Viernes Santo, destacó que instituciones, templos y personas voluntarias mantienen la organización del acto religioso con más fieles participando en el país.
“La Procesión de Viernes Santo debe ser un espacio de reflexión para las personas, es una oportunidad para abrir el corazón y solidarizarse con los que menos tienen, de expresar su fe”, comentó Martínez Cruz.
Por su parte, Sergio Valdivia Bermúdez, representante de la arquidiócesis de Puebla, destacó que la Procesión de Viernes Santo tomará todas las recomendaciones que emitan las autoridades de salud ante los casos de coronavirus.
Señaló que, si las autoridades de salud del país y del estado, determinan que se cancelen los actos con alta concentración de personas, se seguirán las indicaciones correspondientes para no poner en riesgo a la población.
Recordó que en la contingencia de 2009 por la presencia del virus de la Influenza H1N1, un fin de semana se suspendieron las celebraciones religiosas y se cambió el saludo de paz, con el objetivo de reducir las posibilidades de contagio.
Señaló que, por ahora, la organización continúa y el arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez Espinosa, solicitó que se vuelva a incluir a la imagen del Niño Doctor de Tepeaca, la cual, encabezará el inicio de este caminar por las principales calles de Puebla.
Por separado, Eduardo Merlo Juárez, historiador de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla, explicó que, a 29 años del inicio de la Procesión de Viernes Santo, intervendrán siete imágenes, seis que procesionan y una que preside y que se queda en el atrio de la catedral de Puebla, el Cristo de la Expiación.
Destacó que después de la imagen del Niño Doctor, aparecerá la Virgen Dolorosa del Carmen; luego Nuestra Señora de la Soledad; continuará Jesús de las Tres Caídas; le seguirá Jesús Nazareno de San José; y cerrará el Señor de las Maravillas del templo de Santa Mónica.
“Esperamos la participación de más de 160 mil personas durante la XXIX Procesión de Viernes Santo, con lo cual sigue siendo una de las más concurridas y nutridas del país, además de ser una de las más fuertes del continente americano”, destacó.
La Procesión de Viernes Santo en Puebla, tiene su origen en una antigua tradición que se instauró desde la época virreinal y que se llevó a efecto hasta mediados del siglo XIX; luego se suspendió durante el periodo de la Reforma y se retomó en el año 1992.
