jueves, marzo 28, 2024
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Las mujeres solteras son más felices

Un experto mediante varias investigaciones llegó a la conclusión de que a las mujeres solteras les va mejor en salud que a las mujeres casadas o divorciadas.

Como mujeres nuestro cuerpo cambia cuando dejamos de ser solteras a estar casadas. Purs en ocasiones el matrimonio lleva a tener hijos y ocuparnos de otras tareas. Nos han educado que casarse hace a las personas más saludables y felices en todo los sentidos. ¿Pero eso es realmente, verdad?

Según un estudio, de Matthijs Kalmijn,  que acaba de aparecer en línea en la revista Social Forces. En el transcurso de 16 años, se llamó por teléfono a más de 11,000 adultos en Suiza una vez al año y se les preguntó sobre su salud y bienestar.

Según diferentes opiniones de expertos, casarse mantiene a las personas felices y saludables, debido a que las parejas cuidan del uno del otro. Como en la alimentación, se apoyan incondicionalmente y son más felices por compartir momentos juntos, pero en realidad el estudio, demostró todo lo contario.

Las personas adultas que estaban casadas en realidad estaban menos saludables a comparación de cuando estaban solteras. Durante el transcurso de su matrimonio, su salud no mejoró. En realidad, su nivel de enfermedad no cambió en el transcurso de su matrimonio, e incluso, las personas se dieron cuenta de que habían envejecido.

Según un estudio americano, “el alentar el matrimonio para promover la salud puede estar equivocado. De hecho, casarse aumenta el riesgo de un divorcio, y el divorcio, parece ser peor para la salud para estas últimas tres décadas”.

Sin embargo, las mujeres casadas poseen más beneficios de servicios médicos a comparación de las mujeres solteras. Esto se debe a que los planes de salud y gobierno, están pensando para la formación de familias, por lo que un plan de salud familiar es más conveniente que para una sola persona. La creencia de que casarse hace a las personas más felices fue derribada hace mucho tiempo, con datos de al menos 18 estudios en los que se siguió a las mismas personas a lo largo del tiempo.

Por otro lado, el estudio de Kalmijn abordó a las personas divorciadas. Las personas que se divorciaron se volvieron significativamente más deprimidas y menos satisfechas con sus vidas. Las implicaciones negativas de divorciarse por depresión fueron 2.5 veces mayores que las implicaciones positivas de casarse.

Con información de Soy Carmín.

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